La Vanguardia (1ª edición)

El PDECat se divide en el Congreso tras tomar el mando Puigdemont

El Gobierno pulsa sin éxito a Nogueras ante la votación del objetivo de déficit

- TONI BATLLORI JUAN CARLOS MERINO Madrid

Cuatro de los ocho diputados se ausentan en la votación de RTVE como aviso al PSOE

No era una votación relevante porque estaba abocada desde el principio al fracaso: el nombramien­to de Rosa María Mateo como administra­dora única de RTVE en una primera vuelta para la que el Gobierno de Pedro Sánchez carecía de la mayoría requerida de dos tercios del hemiciclo. Pero la de ayer era la primera votación en el Congreso de los Diputados después de que el pasado fin de semana Carles Puigdemont impusiera un golpe de timón en el PDECat. El primer test, por tanto, después de que la nueva vicepresid­enta de la formación exconverge­nte, Míriam Nogueras, advirtiera de que pondrán “más difícil” su apoyo al Ejecutivo socialista. Y el resultado fue que el PDECat se dividió en esta primera votación.

Cuatro de sus ocho diputados en el Congreso, de hecho, ni siquiera asistieron a la votación. Fueron la propia Nogueras y Lourdes Ciuró, diputadas afines a Puigdemont, además de Sergi Miquel y Toni Postius. Unas ausencias, las de Nogueras y Ciuró sobre todo, que sorprendie­ron a los otros cuatro diputados del PDECat, que sí acudieron a votar, y afirmativa­mente, tal y como tenían acordado: Carles Campuzano, Jordi Xuclà, Ferran Bel y Feliu Guillaumes.

La propia Nogueras y Campuzano, antes de la votación, confirmaro­n su voto afirmativo a la portavoz y al secretario general del grupo socialista, Adriana Lastra y Rafael Simancas. Por eso también a ellos les sorprendió mucho que, en el momento en que la megafonía del Congreso llamaba a los diputados a votar, Campuzano se dirigió directo al hemiciclo... mientras Nogueras se fue en dirección contraria, a su despacho, y se llevó del brazo además a Sergi Miquel.

El nombramien­to de Rosa María Mateo fracasó como estaba previsto en esta primera votación, pero ni siquiera logró la mayoría absoluta de 176 votos que requerirá en el pleno de mañana para salir adelante. De hecho, ayer sólo logró 168 votos a favor, 117 nulos y otros 3 en blanco. Así que al Gobierno le tocará de nuevo cruzar los dedos mañana, para intentar zanjar la tormentosa tramitació­n parlamenta­ria para la renovación provisiona­l de la cúpula de RTVE.

Pero aún más trascenden­te será la votación que a continuaci­ón, mañana también, se producirá para intentar ratificar el acuerdo del Gobierno que fija el objetivo de estabilida­d presupuest­aria y deuda pública, junto al techo de gasto para los presupuest­os del 2019, que igualmente requiere para su aprobación de una mayoría absoluta en el Congreso antes de su remisión al Senado, donde la mayoría absolutísi­ma del PP prevé dinamitarl­os.

Tras la fracasada votación de ayer, no obstante, fue la vicepresid­enta del Gobierno, Carmen Calvo –en su calidad de ministra de Relaciones con las Cortes–, la que se reunió con Míriam Nogueras, para conocerla tras su nombramien­to y también para conocer sus intencione­s tras el cambio de rumbo impuesto por Puigdemont. A la cita también se sumaron Campuzano, por parte del PDECat, y Lastra y Simancas en nombre del PSOE. El propio Gobierno, acuciado por las circunstan­cias, quiere en todo caso asegurarse de que sus objetivos de déficit y deuda obtienen la luz verde este viernes en el Congreso, antes de emprender la batalla del Senado. Un objetivo para el que los ocho escaños del PDECat en la Cámara Baja valen ahora su peso en oro.

Nogueras, efectivame­nte, le transmitió a Calvo que el PDECat votará a favor del nombramien­to de Mateo como administra­dora única de RTVE. Aunque ya hay una ausencia anunciada en el grupo: la de Toni Postius, que ese mismo día tiene pleno en el Ayuntamien­to de Lleida, en el que es concejal. Así que el Gobierno habrá de afinar muy bien sus cálculos para poder ganar las dos votaciones del viernes en el Congreso y no morder la lona, lo que tendría imprevisib­les consecuenc­ias por lo que respecta al objetivo de estabilida­d presupuest­aria. Nogueras no le confirmó a Calvo el sentido del voto del PDECat al respecto, lo que mantendrá al Gobierno y al PSOE en vilo hasta el último segundo. Calvo pulsó por tanto a Nogueras al respecto, pero sin éxito. Diputados de la formación soberanist­a afirman que seguirán el criterio que acuerde, en este sentido, el Govern de la Generalita­t, adoptando una posición que, eso sí, será común entre el PDECat y ERC.

Y pese a que diputados de varios grupos dieron por hecho que Puigdemont habría querido mandar un nítido mensaje al Gobierno, alertándol­e de lo que puede pasar mañana, la propia Nogueras negó después toda intenciona­lidad a las ausencias del PDECat en la votación de ayer. Ella tenía una reunión prevista en su despacho, según alegó, y no pensó que se fuera a dar tanta trascenden­cia a su ausencia en una votación que, en todo caso, el Gobierno ya tenía perdida de antemano. También negó Nogueras toda división entre los diputados del PDECat en el Congreso que, muy al contrario, mantendría­n una relación muy estrecha y fluida. Y para evidenciar­lo, al término del pleno, Nogueras, Ciuró, Campuzano y Xuclà se fueron después a comer juntos en las cercanías del Congreso.

Campuzano, en todo caso, ya advirtió ayer que la propuesta de objetivo de déficit del Gobierno, pese a que beneficia a la Generalita­t porque le permite un mayor margen de gasto, es “insuficien-

La ausencia del pleno de las diputadas afines al expresiden­t pone en alerta al Ejecutivo

Los exconverge­ntes mantendrán la incógnita sobre su posición hasta mañana

te”. Además consideró que si pese a ser aprobados en el Congreso después son rechazados por el Senado, “no se soluciona nada”. “Quizá toca plantear alguna modificaci­ón legislativ­a, si el Gobierno quiere que sus objetivos de déficit público acaben aprobándos­e”.

Campuzano aseguró que hasta mañana mismo mantendrán negociacio­nes “intensas” con el Gobierno central, y hasta entonces no fijarán su posición. “En cualquier caso, el Gobierno sabe que la estabilida­d política depende de que el diálogo político dé resultados”, reiteró. Si hay resultados, pasarán unas cosas; y si no hay resultados, pasarán otras. “Todos vamos a trabajar para que el diálogo político dé resultados”, confió el portavoz del PDECat. “Mientras haya prisiones provisiona­les injustific­adas y acusacione­s penales desorbitad­as, no va a haber normalidad política”, alertó no obstante Campuzano.

Y finalmente fue la propia vicepresid­enta Calvo la que quiso poner algunos puntos sobre las íes: “No va a haber adelanto electoral y lo que va a haber son presupuest­os generales del Estado, para que podamos gobernar”, afirmó. Sólo bastó cambiar al Gobierno, aseguró, para demostrar que el “austericid­io” y los ajustes económicos y presupuest­arios que imponía el ejecutivo de Mariano Rajoy no eran obligados, y con el beneplácit­o además de la Unión Europea.

La vicepresid­enta anunció igualmente que si el PP tumba en el Senado sus objetivos de déficit, “encontrare­mos soluciones”. “Lo que no es fácil de entender ni tiene mucho sentido es que el Senado vete al Congreso, que es donde se inviste al presidente del Gobierno y donde se produce la votación definitiva de los presupuest­os generales del Estado”, argumentó. “Hay que respetar la posición constituci­onal que tiene el Congreso”, zanjó Calvo.

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DANI DUCH Jordi Xuclà (PDECat) y Adriana Lastra (PSOE), ayer a su llegada al pleno del Congreso
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