Inglaterra prohibirá las bebidas energéticas a adolescentes
El Gobierno británico prohibirá la venta de bebidas energéticas como Red Bull y Monster Energy a niños y adolescentes en Inglaterra, según informó ayer el diario The Guardian. La medida se enmarca en la estrategia de salud pública del gobierno de Theresa May para contrarrestar la epidemia de obesidad que se registra en el Reino Unido.
No se ha decidido aún si la medida se fijará para menores de 16 años o de 18. Inicialmente se aplicará sólo a Inglaterra, pero los gobiernos de Escocia, Irlanda del Norte y el País de Gales también la podrán adoptar si lo consideran oportuna.
Los principales argumentos para limitar el acceso de niños y adolescentes a las bebidas energéticas son su alto contenido en cafeína y en azúcar. Una lata de 250 mililitros de Red Bull contiene el triple de cafeína que una Coca-Cola. Otras bebidas energéticas contienen cantidades incluso más altas. En cuanto al azúcar, estas bebidas suelen tener más que otros refrescos y aportar un 60% más de calorías.
Según datos de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, uno de cada cuatro niños y niñas británicos de entre seis y nueve años consume bebidas energéticas. En la franja de edad de 10 a 17 años, la cifra se eleva al 63% para los chicos y el 58% para las chicas.
En comparación con otros países europeos, los adolescentes británicos consumem alrededor de un 50% más de bebidas energéticas, “a menudo porque se venden a precios más baratos que otros refrescos”, ha afirmado la primera ministra Theresa May en un comunicado.
La normativa sobre venta de bebidas energéticas a niños y adolescentes aún no está aprobada a la espera de que el gobierno defina hasta qué edad se fijará la prohibición, informó The Guardian.