Lopetegui, triste y acorralado

La situación de Julen Lopetegui empieza a ser difícil en el Madrid, que protagoniza el peor arranque de temporada de la era Florentino Pérez. Seco el equipo de cara a portería, donde no marca desde hace tres partidos, el técnico se esfuerza en dar una imagen de normalidad, pero se le ve triste, consciente de estar ahora muy lejos de los objetivos trazados, tanto en juego como en resultados. Lopetegui se defendió ayer en la rueda de prensa previa al partido contra el Alavés asegurando que las sensaciones podían ser malas desde fuera del club pero que desde dentro son muy buenas. “Las críticas tenemos que asumirlas con naturalidad. Ahora parece que no atravesamos un momento maravilloso, pero también hay cosas positivas. Trataremos de consolidar lo bueno y corregir lo malo y seguimos con una mentalidad y confianza absolutas”, comentó. El entrenador dijo hacer poco caso a los reproches y para él el único borrón de la temporada es “la primera parte ante el Sevilla. Un entrenador siempre es el responsable de lo malo; de lo bueno, nunca”. Preguntado por si para él el partido de Vitoria es una final, esquivó el sentido de la pregunta: “Para un entrenador del Madrid todos los partidos son una final”. Tampoco cree que el equipo esté en crisis: “No analizo lo que la gente pueda pensar. Yo sólo estoy pendiente de trabajar el día a día. Todos los objetivos están intactos”. / Carlos Novo