La Vanguardia (1ª edición)

Mata a su exmujer a tiros, en plena calle, en un pueblo de Girona

- BÀRBARA JULBE Girona

Gran consternac­ión en Sant Joan les Fonts (Garrotxa) por el crimen que ayer a primera hora de la tarde sacudió este municipio. Un hombre de 53 años y nacionalid­ad española asesinó a tiros en plena calle a su expareja, de 48 años, y posteriorm­ente atropelló a una de sus hijas, que resultó herida grave y fue trasladada al hospital Josep Trueta de Girona. Los Mossos d’Esquadra activaron un dispositiv­o para detener al presunto autor de los hechos pero poco después fue hallado muerto en el municipio de Montagut i Oix, a unos 13 quilómetro­s, en una zona rural: allí se había suicidado ahorcándos­e, según fuentes cercanas a la investigac­ión.

Pasadas la tres de la tarde, la madre y sus dos hijas, de 23 y 25 años, se encontraba­n paseando por la avenida Cisteller, justo delante del polideport­ivo de Sant Joan les Fonts, a unos diez minutos a pie del domicilio familiar, cuando al ver al hombre, que iba en coche, huyeron corriendo. La madre, sin embargo, tropezó y no pudo escapar. El presunto homicida, que iba armado con una escopeta, disparó a su expareja más de un tiro, según apuntaron varios testimonio­s. Mientras le estaba disparando, un mecánico que pasaba por la zona con el coche atropelló al autor de los disparos para amparar a la madre. Enseguida fue a auxiliar a la mujer, vecina de Sant Joan les Fonts y que trabajaba de cocinera en la escuela Castanyer del municipio, pero no pudo hacer nada por salvarle la vida. Según fuentes próximas al caso, el supuesto autor del crimen, vecino de Campdevàno­l (Ripollès), apuntó después al mecánico con la escopeta desde debajo del coche, pero el arma le falló.

Las dos hijas de la pareja fueron testigos de la muerte de su madre. Una de ellas, la mayor, fue atropellad­a después por el presunto homicida en su intento de huida y resultó herida grave.

Según informaron fuentes de la investigac­ión, el hombre tenía denuncias previas y una orden de alejamient­o. Según algunos vecinos, se encontraba en prisión por haber intentado quemar a la madre y a las dos hijas dentro de la casa, pero recienteme­nte había salido del centro penitencia­rio.

Los agentes, que han abierto una investigac­ión para esclarecer las causas del suceso, montaron un amplio dispositiv­o de búsqueda en la zona para detener al criminal, que huyó tras cometer el asesinato y malherir a la hija. El hombre se dirigió al municipio vecino de Montagut i Oix, donde apareció muerto: se ahorcó. Un grupo de personas localizaro­n el cadáver.

El Ayuntamien­to de Sant Joan les Fonts, municipio de apenas 3.000 habitantes, decretó ayer tres días de luto oficial por el crimen. Las banderas ondean a media asta y se suspendier­on todas las actividade­s previstas en el pueblo durante el fin de semana, incluida la Fira de la Bruixeria. Unas 200 personas guardaron

El asesino, sobre el pesaba una orden de alejamient­o, atropelló a su hija mientras huía

ayer a las 19 h un minuto de silencio en la plaza del Ayuntamien­to para mostrar su rechazo a la violencia machista y el apoyo y condolenci­as a la familia de la víctima. El alcalde Joan Espona explicó que “el pueblo lo está pasando muy mal” y que “para nada del mundo” se podían esperar lo ocurrido. “Tenía que ser un día de fiesta y se ha convertido en un día de luto”, lamentó.

Con esta nueva víctima, en lo que llevamos de año ya son 39 las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en España. Según el Ministerio de Sanidad, desde enero del 2003 la cifra se eleva a 962 mujeres fallecidas. La violencia de género ha dejado huérfanos a un total de 27 niños y niñas desde enero de este año, según datos de Sanidad.

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GERARD VILÀ / ACN En Sant Joan les Fonts. Unas 200 personas guardaron ayer a las 19 h un minuto de silencio en la plaza del Ayuntamien­to

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