Melania Trump recibe críticas por lucir el sombrero salacot en su viaje a África
La gira africana, de carácter “diplomático y humanitario” según la Casa Blanca, que Melania Trump ha llevado a cabo esta semana ha acabado tiñiéndose de cierta polémica por el estilismo lucido por la primera dama de Estados Unidos. Una polémica que tuvo su momento cumbre el viernes en Kenya cuando se cubrió con un salacot, el sombrero blanco que llevaban los colonizadores al llegar al continente africano por la creencia de que el sol afectaba más al cerebro blanco que al negro. El salacot se convirtió en símbolo del colonialismo blanco y por ese motivo, el gesto de Melania Trump no ha sido bien recibido por gran parte de la comunidad africana. En su afán de mimetizarse con el paisaje y sus gentes, Melania ha ido utilizando modelos y complementos inspirados en África con mayor o menor fortuna. La esposa de Trump salió de Washington con destino a Ghana calzada con unos stilettos con estampado de leopardo diseñados por Manolo Blahnik y una gabardina color camel. En Malaui se calzó unos mocasines de Zara con estampado de serpiente y salió de Kenia, en dirección a Egipto, con un vestido con estampado de animales africanos. Ayer, en su visita a las pirámides, optó por un conjunto que recordaba al que usaban los egiptólogos británicos a principios del pasado siglo.