Aragonès reúne a los consellers por los presupuestos
El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, se está reuniendo entre ayer y hoy, en su calidad de conseller de Economia, con todos los consellers y los secretarios generales de los departamentos para ultimar los detalles de los presupuestos del 2019. El máximo responsable de los números de la Generalitat les ha citado en la sede de la Conselleria d’Economia después de que todos ellos presentaran antes del pasado 28 de septiembre las respectivas previsiones presupuestarias para el próximo ejercicio y de que en este tiempo el departamento de Aragonès haya intentado ajustarlas. Esta, según fuentes del Govern, es la mejor evidencia de que el Gabinete de JxCat y ERC sigue trabajando a buen ritmo y tienen voluntad de permanencia en el tiempo. A partir de estos primeros contactos, en todo caso, empezará el tradicional tira y afloja entre el titular de Economia y el resto de consellers, que mirarán cada uno de ellos que sus departamentos sean los menos afectados por la ineludible necesidad de cuadrar los números. Los ajustes que acaben siendo necesarios no podrán, de todos modos, demorarse, a estas alturas del año, excesivamente en el tiempo, y menos después de ayer el propio presidente de la Generalitat, Quim Torra, anunciara, en la sesión de control en el Parlament, que el Govern aprobará y presentará el proyecto de presupuestos del 2019 “en las próximas semanas”. Torra lo dijo en respuesta al requerimiento que le efectuó Jéssica Albiach, de Catalunya en Comú Podem, y aprovechó para reiterar su voluntad de negociarlos con esta formación. “Esperamos tener largos debates con ustedes”, subrayó el presidente de la Generalitat, a diferencia de lo que admitió que ocurrirá con la CUP: “Con la CUP no parece que sea posible tener largos debates, pero como mínimo sí que querremos presentároslos”. La voluntad del Govern, sea como sea, es poder aprobar las cuentas, porque entiende que esta será la imagen que mejor transmitirá la normalidad de la legislatura que quiere trasladar a la opinión pública, y máxime, además, después de que este 2018 la Generalitat haya tenido que actuar –como consecuencia de la aplicación del artículo 155 de la Constitución– con los presupuestos prorrogados del 2017.