Revertir la menopausia
El Clínic logra reactivar la fabricación de óvulos con una intervención por laparoscopia en mujeres con fallo ovárico precoz
El equipo de reproducción asistida del Clínic ensaya en 15 mujeres una técnica quirúrgica que pretende revertir la menopausia que sufren mujeres con fallo ovárico precoz. El 1% de la población femenina.
Cortan un trocito de la corteza del ovario, lo trocean en porciones muy pequeñas y los vuelven a insertar en el otro ovario con ayuda de un pegamento biológico. Una hora de operación por laparoscopia. Al cabo de un tiempo, el ovario es capaz de producir óvulos de nuevo. Ha ocurrido así en el 60% de las mujeres participantes en el ensayo y una de ellas, María José Ortega, consiguió quedarse embarazada mediante una fertilización in vitro con su propio óvulo. En agosto trajo al mundo a una niña.
“No es un ensayo para revertir la menopausia fisiológica, sino para esta enfermedad que impide ser madre”, advierte Francesc Carmona, responsable de ginecología del Clínic.
“La técnica es una simplificación de una idea desarrollada en Japón, y creemos que la hemos mejorado, al menos a la vista de los resultados que ya tenemos, aunque estamos hablando de una fase absolutamente experimental que habrá que repetir en otros equipos y más pacientes para poder decir que realmente es una opción”, advierte Francesc Fàbregues, responsable de reproducción asistida del hospital y coordinador del ensayo. Los japoneses lo realizan en dos intervenciones
El propio tejido del ovario recupera su capacidad tras cortar una porción en trocitos y reimplantarse
con 48 horas de diferencia para estimular químicamente esos trocitos de ovarios antes de volverlos a insertar. “Pero la reactivación de ese tejido ovárico se produce en nuestro caso sin ningún producto químico. Creemos que es el propio corte, el hecho de trocearlo, lo que los reactiva”.
En la literatura médica hay suficientes datos sobre ese fenómeno, según el especialista del Clínic. “Ocurre por ejemplo en el hígado. Los órganos permanecen en un tamaño determinado dentro del cuerpo, sin crecer, porque hay una acción inhibitoria. Al cortar en trocitos pequeños, detenemos esa inhibición y el tejido se reactiva. Pero esto es posible porque las pacientes con ese fallo ovárico aún tienen folículos que se pueden reactivar. Antes se pensaba que un ovario menopáusico había agotado toda su carga ovárica, también en los casos precoces, pero ahora sabemos que no, que quedan folículos poco funcionales, inactivos. Y el 60% de las mujeres ha recuperado la actividad reproductiva y la hormonal de sus ovarios”, explica Fàbregues.
La técnica en ensayo es una ventana de esperanza para ese 1% de mujeres que a los 30 años descubren que sus ovarios ya no funcionan y sólo les queda intentar un embarazo con donación de óvulos.
“Al dejar la píldora para intentar quedarme embarazada descubrí que no me venía el periodo. Pasé por varios especialistas y probé tratamientos diversos. Finalmente acabé en el Clínic para una fecundación in vitro con donación de óvulos por la sanidad pública. Y me propusieron probar esta opción en ensayo. Eso fue en octubre pasado y en agosto nació mi hija”, explica María José Ortega, madre a los 32, el primer éxito del ensayo.
De las otras once participantes, el 60% logró respuesta ovárica, produjo ovocitos, y se intentó una fecundación in vitro. Pero no hay ningún otro embarazo de momento.
La investigación está dirigida a mujeres jóvenes, menores de 35 años, con fallo ovárico y menopausia precoz. “Pero es un cambio de paradigma importante, abre muchas posibilidades”, reconoce Francesc Carmona, responsable de Ginecología del Clínic. ¿Podría ser una opción para mujeres con menopausia natural, la asociada a la edad? “No tenemos experiencia para poder decir qué pacientes se van a beneficiar de esta técnica. Ni siquiera sabemos cuánto dura la reactivación del ovario”, aclaran.
El Clínic es pionero en esta opción. Otro equipo de Valencia investiga actualmente con el traslado de células madre para reactivar los ovarios.