Tan divertidos como derretidos
El Tottenham y el PSV hurgan en la herida del otro y se acaban neutralizando
Pocos equipos hay tan divertidos en la Champions como el Tottenham y el PSV, una delicia para los aficionados al fútbol y una bicoca para sus rivales. Despreocupados y ofensivos, se derriten en cuanto se les intenta dar un mordisco. Sin embargo, ellos no renuncian a su estilo. Siempre buscando el gol, sin obsesionarse con sus carencias. La mejor defensa es un buen ataque, piensan haciendo de la necesidad virtud. Pero no pueden esconder sus defectos. No cuando enfrente están Kane o Eriksen o Hirving Lozano. Y al final eso hace que ambos hayan encajado ya 8 goles y estén sólo con un punto.
El Chucky Lozano le hizo la vida imposible a la defensa del Tottenham, cuyos grandes delanteros tuvieron que asumir que tienen espaldas y rodillas de barro. Al mexicano no hay que quitarle un ojo de encima. Hasta sin balón es un peligro. Así aprovechó un exceso de confianza de Alderweireld para robarle la cartera y encarar a Lloris. El belga en su intento de enmendar su error... le ayudó a marcar de rebote.
Enseguida pudo igualar el Tottenham en un córner por medio de Sánchez. El colegiado anuló de forma errónea el tanto porque Kane, bajo palos, estaba en fuera de juego posicional. Tanto va el cántaro a la fuente que los ingleses derrumbaron el muro de Zoet. Fue en una asociación entre Eriksen, Trippier y Lucas Moura, cuyo tiro lo desvió Viergever, que despistó a su propio portero.
Antes del descanso, Pereiro pudo poner en ventaja a los locales pero tras la pausa lo que llegó fue el segundo del Tottenham, con un envío de Eriksen que remató Kane, siempre en boca de gol. Cuando los ingleses estaban cerca de sentenciar, Lozano saltó la banca al forzar la roja a Lloris. Con uno más, De Jong, en el área pequeña, hurgó en la herida de la defensa del Tottenham.
Moura y Kane remontaron el 1-0 de Lozano pero el Chucky forzó la roja de Lloris y De Jong empató