La ocupación crece en 183.000 empleos en verano, pero se aminora el ritmo
La tasa de paro cae por debajo del 15% por primera vez en diez años, según la EPA
Casi diez años y una crisis de dimensiones históricas después, la última encuesta de la población activa (EPA) devuelve en buena medida la imagen del mercado laboral en España a la situación de finales del 2008. En plena campaña de verano, se mantuvo la creación de empleo y se rebajó el volumen de desempleo, aunque a un ritmo más suave que en años anteriores. Entre julio y septiembre, la ocupación se elevó en 183.900 personas con respecto al segundo trimestre del año –una cifra muy similar a la del 2015 pero alejado de las subidas de más de 225.000 trabajadores de los últimos dos años–. En total, la EPA arroja que hay 19.528.000 ocupados, el mejor dato desde finales del 2008, cuando se llegó a los 20 millones de empleos. El máximo de ocupación se marcó hace once años, con 20,75 millones.
La tasa de paro se sitúa por debajo del 15%, un nivel que no se alcanzaba desde el último trimestre del 2008 (13,8%). El porcentaje de desempleados sobre la población activa rozó el 27% a principios del 2013 y, entre julio y septiembre, ha vuelto al 14,6%. Durante el verano, el paro cayó en 164.100 personas, por lo que el número de trabajadores en busca de empleo se quedó en 3,32 millones, una situación que no se producía desde hace casi diez años. Con la estacionapleo lidad de cara, ya había cinco comunidades con una tasa de paro por debajo del umbral del 10%: Baleares (7,2%), Cantabria (9%), Euskadi (9,4%), Navarra (9,7%) y Aragón (9,9%). Catalunya (ver recuadro) aparece justo por encima del 10%. De todas formas, se trata de la reducción de parados más baja de los últimos cinco años.
El colectivo de parados de larga duración (más de un año sin empleo) baja a los 1,38 millones, después de rozar los tres millones en el 2013 y 2014. De ellos, 761.000 son mujeres.
En los últimos doce meses, la economía ha creado 478.000 puestos de trabajo, mientras que el paro se redujo en 406.000 personas. La tasa interanual de ocupación fue del 2,5%, tres décimas menos que el registro del mismo periodo del año anterior y una por debajo del 2016. Una desaceleración que, tal y como recordaban ayer desde el Banco de España, es incluso algo superior a la avanzada por los datos disponibles sobre afiliación a la Seguridad Social.
El grueso de la creación de em- vuelve a recaer en el sector de servicios. En estos meses de verano, el número de ocupados en dichas actividades aumentó en 210.000 personas con respecto al segundo trimestre del año, frente la subida de casi 25.000 trabajadores en la construcción, los 2.800 de industria y la caída de 54.000 ocupados en la agricultura.
La contratación por tiempo determinado predomina en el perfil de los nuevos asalariados, en plena campaña de verano. En el tercer trimestre, había 150.000 trabajadores más con contrato temporal, mientras que los indefinidos crecieron en 25.000. En cambio, en términos interanuales, del aumento de 526.000 asalariados, 374.000 se corresponde a empleados fijos y 152.000 a los de carácter temporal. En total, los 4,50 millones de asalariados con contrato temporal supone la cifra más alta desde hace prácticamente una década. Al tiempo, aquellos con contrato fijo superan los 11,92 millones, nivel no alcanzado desde el 2009.
Sin embargo, con respecto al trimestre anterior, los ocupados a tiempo completo aumentaron casi en 370.000 personas, frente a los contratados por horas, que experimentaron una caída de 185.000.
El envejecimiento de la población también deja su impronta en el mercado laboral: la EPA registra un máximo histórico entre los ocupados de más de 54 años, al alcanzar por primera vez los 3,35 millones de personas.
En plena campaña turística, hay 25.000 asalariados fijos más, frente a una subida de 150.000 temporales