Un menor salta desde un tejado tras anunciarlo en las redes
El aviso de los amigos evitó que la acompañante cayera
La rápida intervención de los guardias de seguridad de un centro comercial de Puerto Banús, en Marbella, evitó que la tragedia fuera aún mayor. Los agentes llegaron a tiempo de impedir que una adolescente de 14 años se lanzara al vacío desde el tejado del edificio, situado en pleno centro de la localidad, pero no pudieron evitar que lo hiciera otro niño de la misma edad, que se tiró instantes antes de que pudieran evitarlo.
La decisión de ambos de poner fin a sus vidas fue previamente anunciada en las redes sociales por los implicados, de nacionalidad británica ambos, y alumnos de un colegio de élite de la Costa del Sol. Fueron sus amigos los que al darse cuenta de los mensajes que ambos habían colgado en la red avisaron con urgencia al centro comercial. Los guardias de seguridad iniciaron inmediatamente una batida para localizarlos, hasta que finalmente dieron con ellos en el tejado, donde habían accedido a través de una escalera de emergencia.
El adolescente ya se había tirado a la calle, pero ella vaciló durante unos segundos, lo que fue aprovechado por los guardias para inmovilizarla. Al parecer, mientras le ponían los grilletes para inmovilizarla, la chica les pidió que hicieran una foto del momento para poder subirla a las redes sociales. Después entró en una crisis de ansiedad y tuvo que ser trasladada a un hospital.
La caída era de unos 20 metros y el joven chocó primero con unos árboles antes de terminar en la acera, por lo que en un primer momento sobrevivió al impacto, aunque falleció poco después mientras los sanitarios procedían a realizar las maniobras de reanimación. La noticia se propagó inmediatamente entre docentes y alumnos del centro educativo, que se encontraba en periodo de vacaciones al regirse por el calendario escolar británico.
El aumento del suicidio de jóvenes y adolescentes relacionados con el abuso de las redes sociales es un problema que preocupa a los expertos desde hace años. En muchos casos, detrás de estas decisiones inexplicables se encuentra la obsesión por exponerse en internet.
“La utilización de las redes sociales como el escaparate donde exponerse hasta límites insospechados está detrás de algunos suicidios, como puede ser el de Marbella, o los casos de chicos que mueren cuando intentan hacerse una foto en condiciones extremas o, incluso, en accidentes por balconing”, señala Juan Luis Ortigüela, psicólogo en un centro educativo de Sevilla.
Como otro elemento del problema se encuentra la situación de quienes buscan consejo en internet para suicidarse, lo que se conoce como cibersuicidio, “la acción de quitarse la vida motivada por la influencia de páginas web, salas de chat y foros”, enumera Ortigüela. Un informe de la OMS señala que, “aunque existe un vínculo con los trastornos mentales, muchos suicidios se producen impulsivamente en un momento de crisis, como los que acaecen por problemas económicos, rupturas de relaciones o enfermedades crónicas”.
Cunde la preocupación en el colegio de estos adolescentes, dos británicos que viven en Puerto Banús