Un obispo cercano al papa Francisco, investigado por supuestos abusos
El argentino Gustavo Zanchetta vive en la misma residencia que el Pontífice
Otro caso de abusos sexuales ha estallado en la Iglesia católica, pero esta vez el sospechoso está en casa del Papa y es su amigo. El obispo argentino Gustavo Zanchetta, capuchino de 54 años, es investigado por el Vaticano tras ser denunciado por curas de la diócesis de Orán (Salta, Argentina), que dirigió entre el 2013 y el 2017, antes de renunciar por supuestos problemas de salud.
El portavoz provisional del Vaticano, Alessandro Gisotti, confirmó ayer una “investigación previa” contra Zanchetta y reveló que la dimisión se debió a “su dificultad para manejar las relaciones con el clero diocesano y por las relaciones muy tensas con los sacerdotes de la diócesis”. Gisotti negó que la renuncia tuviera relación con las acusaciones de abusos sexuales como publicó la semana pasada El Tribuno de Salta. El periódico indicó que la salida del obispo fue consecuencia de los supuestos ultrajes cometidos en el seminario de Orán, fundado por el mismo Zanchetta al llegar al cargo, y que será cerrado este año.
“En el momento de su renuncia hubo acusaciones de autoritarismo en su contra, pero no hubo acusación de abuso sexual”, afirmó Gisotti, que sustituye interinamente al jefe de prensa del Vaticano, el estadounidense Greg Burke, y a su adjunta, la española Paloma García Ovejero, que dimitieron inesperadamente el lunes en un nuevo episodio de los intríngulis vaticanos. El diario salteño iba más allá, vinculándolo al relevo por Francisco en el 2017 del nuncio en Argentina, Emil Paul Tscherrig, quien habría trasladado a Roma las denuncias de al menos tres sacerdotes de Orán.
Gisotti añadió que el actual obispo de Orán, Luis Antonio Scozzina, “ya ha recopilado algunos testimonios que aún deben ser presentados ante la Congregación para los Obispos” y que mientras tanto Zanchetta “se abstendrá de trabajar”. Tras dejar Salta, Zanchetta vivió unas semanas en el arzobispado de Madrid antes de trasladarse a Roma, donde fue nombrado por el Pontífice asesor de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, organismo que gestiona los bienes e inmuebles de la Iglesia.
Zanchetta es considerado cercano a Francisco y, de hecho, vive en la casa de Santa Marta, donde también reside el Papa. Cuando Bergoglio era arzobispo de Buenos Aires, ejercía en parroquias de Quilmes, a las afueras de la capital argentina. Al asumir el papado en el 2013, el Pontífice nombró a Zanchetta obispo de Orán, lo que generó críticas en Quilmes, donde el capuchino ya no tenía buena fama y también fue acusado de autoritario.
El Papa convocó en febrero una cumbre para analizar los abusos sexuales en la Iglesia. Uno de los primeros escándalos saltó en el 2004 en Chile, donde tres feligreses –James Hamilton, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo– denunciaron al cura Fernando Karadima. El caso marcó el viaje del Papa a Chile el año pasado, y esta semana la Asociación de Corresponsales de Chile otorgó a los tres denunciantes el premio Personajes del Año 2018.