La asesina de Gabriel Cruz se autolesiona en prisión
Ana Julia Quezada, la asesina confesa del niño Gabriel Cruz Ramírez, intentó autolesionarse “de manera muy leve” el pasado 31 de diciembre. Miguel Ángel de la Cruz, director de la prisión de El Acebuche de Almería, donde se encuentra internada a la espera de juicio, negó ayer informaciones sensacionalistas que hablaban de “intento de suicidio”.
La dirección de la penitenciaría ha decidido, de manera preventiva, asignar una reclusa de confianza para que acompañe durante las 24 horas a Ana Julia. En todo caso, las autoridades penitenciarias consideran que el riesgo de suicidio en la mujer dominicana “es muy bajo”. “Si existiera realmente ese temor, la interna estaría sometida a los tratamientos estipulados para estos casos”, señalan.
Ana Julia se autoinfligió unos leves arañazos en las manos, realizados probablemente con una cuchilla desechable, tras conocer la noticia de que en Almería se había inaugurado un espacio de paz y convivencia dedicado a Gabriel. “Todas las noticias que se publican sobre el caso le afectan especialmente y no se las toma bien”, aseguran en la cárcel.
Gabriel Cruz, que tenía 8 años, desapareció el 27 de febrero del 2018 en Las Hortichuelas de Níjar (Almería) y su cadáver fue descubierto días después en el maletero del coche de Ana Julia, que era compañera sentimental del padre del niño y confesó ser la autora del crimen. Patricia Ramírez, la madre del pequeño, declaró esperar “que Ana Julia no volverá a pisar las calles hasta el final de sus días”.