Vaiana se suma a la magia de Disney on Ice
El espectáculo, que celebra su 35. aniversario, vuelve renovado a Barcelona con 44 patinadores sobre hielo en escena y más películas representadas
Con Vaiana, que según sus creadores es la “heroína más feminista de Disney”, como gran novedad, el espectáculo Disney on Ice regresa al Palau Sant Jordi de Barcelona del 14 al 17 de marzo. “Vaiana es diferente. Es una mujer joven que persigue sus sueños. Nos aporta mucho”, afirma el mánager de la versión que llega a la capital catalana, Joshua Rothschild. La gira que encarna las películas de animación de la conocida productora con patinadores sobre hielo cumple 35 años recorriendo medio mundo. Hace ya tres décadas que desembarcó en España por primera vez.
Ahora vuelve renovada bajo el título Conquista tus sueños. Esta vez se reflejan más filmes que en otras ocasiones. Concretamente ocho: Aladdin, La bella y la bestia, Vaiana, La Sirenita, La Cenicienta, Enredados, La bella durmiente y Frozen. El espectáculo arranca con Aladdin. Y es que también hay héroes patinadores. Mickey y Minnie, que cumplen su noventa aniversario, son los narradores que trazan un hilo conductor entre historia y modernidad. Como en las películas, las canciones son los puntos álgidos de la función. A partir del lunes, La Vanguardia ofrecerá descuentos de hasta el 20% para sus suscriptores a través del canal www.entradasdevanguardia.com
“Me inicié en el patinaje gracias a Disney on Ice. Después de ver una representación me quise dedicar. Comencé a competir y después de dejarlo me llegó la oportunidad de hacer la audición. Ahora llevo tres años viajando con la producción”, cuenta Rubén Parrera, el único patinador español de los 44 que salen en escena. “Actuar en casa será muy especial”, reconoce el madrileño. El espectáculo sobre hielo llegó el año pasado a 75 países de los cinco continentes. Suma más de cuatro millones de espectadores anuales.
La mayoría de los intérpretes se dedicaban anteriormente al patinaje artístico. Algunos de ellos llegaron a participar en competiciones internaciones. Este es el caso de Lee Chandler: “Es muy diferente a competir. El público lo vive con más excitación”, relata el canadiense. En la obra realizan solos, actuaciones en pareja y otras en grupo. Llegan a coincidir 35 patinadores en el escenario congelado. Las piruetas y las figuras son espectaculares. “Al final hacemos de actores y para nosotros es más fácil porque en el patinaje artístico ya estamos acostumbrados a interpretar”, agrega la mexicana Alicia Sánchez. Se utilizan 600 metros de tela para vestir a los personajes. Se necesitan 15 horas para armar todo el montaje. Un equipo de 120 profesionales se van desplazando de país en país.
La obra acaba siendo un show teatral con efectos especiales, como algunos recursos pirotécnicos, capaz de emocionar a los más pequeños, a sus padres y también a los abuelos. “Será mi quinta vez en España. Es una audiencia con mucha energía”, indica Rothschild. Mientras los mayores recuerdan las películas más antiguas –por ejemplo, La Cenicienta se estrenó en 1950–, los pequeños corean con energía las canciones de Anna y Elsa de Frozen. Por lo menos eso pasó en el pabellón Zénith de París, una de las últimas ciudades europeas en albergar el espectáculo. Del recinto todo el mundo salió con la ilusión de un niño.