Más parálisis que autocrítica

El club no se plantea cesar a Solari y empieza a asumir un año de transición

El Real Madrid no tomará medidas extremas tras el nuevo fiasco liguero ante la Real Sociedad que le aleja a diez puntos del Barcelona, a una jornada de cerrar la primera vuelta. De momento, la situación de Santiago Solari en el banquillo no corre riesgo, aun a sabiendas en la zona noble del club de que la apuesta por el argentino no va a ser tan exitosa como la de Zidane en enero del 2015. De hecho, entre Florentino Pérez y sus colaboradores impera la sensación de que es mejor tomarse esta temporada como de transición tras el éxito histórico de ganar tres Champions seguidas antes que volver a mover el banquillo, convencidos de que cualquier cosa que hagan probablemente empeorará la situación.

Entre los directivos del Madrid, a estas alturas, queda claro que Solari no se ha hecho con la plantilla, que ha cometido errores graves y que su ascendente sobre los jugadores es muy limitado, pero tamgiado bién que la mejor baza para que continúe el argentino hasta el término de la temporada es que no existe recambio dentro de la estructura del club.

Las voces que hace unas semanas pedían a Florentino Pérez que intentase la vuelta de José Mourinho no se han acallado del todo, pero permanecen en un segundo plano. Primero, porque consultado Mou, este no mostró un gran entusiasmo por regresar a un club en el que dejó más enemigos que amigos. Segundo, porque a poco más de un mes de la eliminatoria de los octavos de final de la Champions ante el Ajax en el club no son muy partidarios de tomar decisiones drásticas antes de quemar las naves en la competición en la que el Madrid ha sabido moverse como pez en el agua pese a los continuados fracasos en la Liga los últimos años. De hecho, el Madrid de Zinédine Zidane llegó a a estar a 16 puntos del Barcelona y el de Mourinho, a 17.

Lo que sí ha vuelto al club con la derrota ante la Real Sociedad ha sido una dosis elevada de victimismo, algo muy a la orden del día con Mourinho en el banquillo pero que era mucho menos visible en las etapas de Ancelotti y Zidane. El propio Emilio Butragueño, siempre tan ponderado en sus comparecencias ante los medios, cargó con dureza contra el VAR acabado el partido por no haber señalado el supuesto penalti a Vinicius: “El VAR se ha puesto para resolver estas jugadas. Nos da la sensación de que no se ha consultado. ¿Entonces, para qué está?”, agregó. Más de lo mismo hizo Solari en sala de prensa: “Fue un penalti de libro”.

En otro hecho insólito, el Madrid prosiguió ayer su campaña contra el VAR a través de su propia televisión, en la que emitió un reportaje en el que se veía al cole- Munuera Montero chocando las manos con sus asistentes tras conceder el primer gol del Eibar al Madrid desde la sala del VAR de la Ciudad del Fútbol.

En ese clima de cultivo de un Madrid tan poco dado a la autocrítica sorprendieron, en cambio, las duras palabras de un Modric que no suele hablar demasiado pero que cuando habla tiene mucho eco en todos los estamentos: “Nuestro problema no es el VAR aunque no nos haya ayudado mucho. Nuestros problemas son otros: hay que hablar claro. Creamos mucho, pero la pelota no entra y concedemos mucho. Hay razones que explican por qué las cosas no nos van bien. Muchos no estamos a nuestro nivel y no podemos tener una cagada al principio de cada partido. Hay que mejorar bastante y estar más juntos y unidos. Debemos sentarnos como hombres y arreglar las cosas”.

Esa falta de unión en el vestuario ya ha sido denunciada varias veces por Sergio Ramos en distin-

tas fases de la temporada. El propio Cristiano ya lo hizo público al poco de llegar este verano a Turín cuando dijo que “aquí hay una familia, lo que se veía menos en mi otro equipo”, en unas declaraciones que dolieron mucho en el vestuario de Valdebebas.

A diferencia de otros días, Sergio Ramos mantuvo tras la derrota ante la Real Sociedad la versión más oficialista y fue muy crítico con el árbitro y el VAR: “Lo de Vinicius es escandaloso, para echarte las manos a la cabeza. Cuando tienes el VAR por lo menos consúltalo si tienes esa bala. Para mí es jodido porque si tienes ese avance tecnológico por lo menos déjalo claro para el resto de la gente. Ahora se generan cosas de fuera del fútbol que dan mucho que pensar. Nos desenganchamos un poco de la Liga pero vamos a seguir luchando”, añadió el defensa.

Ese mensaje de no bajar los brazos es al que se agarra Santiago Solari, cada día más instalado en su papel de entrenador provisional por más que se le ampliara el contrato hasta el 2021.

De todos los problemas futbolísticos que arrastra el Madrid el que más preocupa es la falta de gol, 26, el registro más pobre del equipo blanco en 25 años. Así las cosas, el club no descarta fichar a un delantero centro en este mercado de invierno. También en este caso Solari no queda nada bien parado. Con Mariano lesionado (en toda la temporada el catalán sólo ha jugado en cinco partidos de Liga, en los que no ha podido anotar), el Madrid no tenía el domingo a ningún delantero en el banquillo, tan sólo dos volantes ofensivos: Isco y Ceballos. A las lesiones de Bale, Llorente, Asensio y el citado Mariano, ayer se unió Toni Kroos, con una rotura de grado II en el aductor izquierdo, que puede estar entre dos y cuatro semanas de baja.