Sin ofertas para auditar las elecciones a las cámaras
El concurso queda desierto y habrá una adjudicación directa
El voto electrónico para renovar las cámaras catalanas persigue aumentar la transparencia y la participación, pero también está tropezando con problemas técnicos inesperados. De entrada, el Departament d’Empresa i Coneixement ha tenido que declarar desierto el concurso para auditar el procedimiento de votación, al no conseguir reunir ninguna oferta. Ante ello, se ha decidido iniciar un procedimiento de “adjudicación negociada”, según explican fuentes de la conselleria. Se hará una adjudicación directa tras seleccionar a tres posibles candidatos y entablar negociaciones con ellos.
La falta de candidatos se explica por la incógnita que aún se mantiene sobre el funcionamiento real del voto electrónico, explican fuentes conocedoras del proceso. En paralelo al procedimiento impulsado por la consellera Àngels Chacón, se ha convocado otro concurso, en este caso por el Consell General de Cambres de Catalunya. Este último se realiza para adjudicar la gestión de la votación y su recuento, que posteriormente debe ser auditado por la empresa que finalmente seleccione la Generalitat.
Aunque el plazo para presentar ofertas firmes estará abierto hasta el 21 de enero, han manifestado ya un interés previo por el concurso del Consell de Cambres tres empresas: Scytil, Indra y Ekratos. Este concurso, que valorará tanto las garantías técnicas como la solvencia económica de los ofertantes, se realiza por un precio máximo de 153.100 euros. De ellos, 150.000 corresponden a los servicios de voto electrónico y el resto, a los servicios complementarios, como los equipos para los puntos de votación.
De acuerdo con el decreto publicado ayer en el DOG, las empresas tendrán dos opciones para votar: el 8 de mayo si optan por el voto electrónico presencial, y entre los días 2 y 7 de mayo si optan por votar a distancia. En la Cambra de Barcelona, la única en la que compiten varios aspirantes a la presidencia, la primera batalla se dirimirá el próximo 25 de febrero con la presentación de los candidatos a ocupar 40 puestos del pleno. A ellos se sumarán 14 representantes de grandes empresas (se comprometen a aportar un mínimo de 75.000 euros al año) y otros seis de las patronales.
Scytil, Indra y Ekratos se interesan por la gestión del voto electrónico por unos 150.000 euros