Renuncia el guardaespaldas de Meghan Markle, que sale de cuentas a finales de abril
El primer acto conjunto del año del príncipe Enrique y Meghan ha sido el momento propicio para que la duquesa de Sussex desvelara que está embarazada de seis meses, lo que sugiere que el parto será a finales de abril. La exactriz y el príncipe se casaron en mayo pasado y anunciaron en octubre que esperaban su primer hijo para la primavera del 2019, sin dar más detalles.
En esta ocasión, Meghan ha elegido un estilismo muy alejado de los colores neutros que suele lucir. La duquesa vestía un abrigo rojo de grandes solapas de Sentaler, a juego con los zapatos de tacón, y un vestido morado de Babaton para Aritzia.
La pareja real visitó ayer Birkenhead, en el condado inglés de Meresyside, donde inauguraron una escultura que conmemora el centenario de la muerte del poeta y soldado Wilfred Owen. También visitaron un supermercado y un café comunitario. Durante el recorrido, una niña de 9 años, Kitty Dudley, se atrevió a preguntar a Meghan por el sexo del bebé: “Le pregunté si estaba esperando una niña o un niño y dijo que no sabía”, explicó la pequeña. Justamente la cercanía que la duquesa quiere mantener con el público parece estar en el origen de la renuncia de la jefa de protección de la pareja real. La inspectora de Scotland Yard encargada de sus guardaespaldas, que llevaba seis meses en su puesto, ha dimitido por “cuestiones personales” que nada tienen que ver con la duquesa, dice. Es la primera mujer en desempeñar la función de jefa de seguridad de un miembro de la familia real británica, y ocupó el cargo tras la jubila-