El padre detenido por maltrato perdió otra tutela
El bebé de un mes sigue grave en la UCI del Joan XXIII
El joven de 21 años, de Montblanc, arrestado el jueves por los Mossos d’Esquadra investigado como presunto autor de un delito de lesiones y violencia física habitual en el ámbito doméstico, al ingresar su bebé de un mes en estado grave en el hospital Joan XXIII de Tarragona, perdió la tutela de otro hijo “por un posible caso de malos tratos”, según el Departament de Treball, Afers Socials i Família. Tanto el padre como la madre del bebé, que niegan los hechos, han permanecido detenidos en comisaría otra noche, la segunda, y pasarán hoy a disposición judicial.
A pesar de que la dirección general de Atenció a la Infància i l’Adolescéncia (DGAIA) asumió la tutela de su otro hijo en el 2017, la investigación se acabó archivando al no poderse probar que las lesiones que habría sufrido el menor, fruto de una relación anterior, eran atribuibles a malos tratos o bien a causas accidentales. El padre acudió también en aquella ocasión con su hijo de un año al hospital, y el centro activó el protocolo por maltrato infantil y alertó a los Mossos al observar la naturaleza de las lesiones.
El bebé que ingresó el miércoles seguía ayer noche en la UCI pediátrica con pronóstico grave, con el equipo médico pendiente de la evolución de la hemorragia interna detectada en la cabeza del menor. El cuerpo del pequeño presentaba también algunos hematomas en el cuerpo y lesiones internas. La pareja negó en el hospital y en comisaría haber maltratado a su hijo de un mes y atribuyeron el estado del bebé a una supuesta reacción adversa a un medicamento que le suministraron para curar unos hongos que le salieron en la boca.
El juzgado de guardia de Tarragona interrogará hoy a la pareja y decidirá si ordena su ingreso en prisión o la libertad provisional. La DGAIA ha asumido de forma cautelar la tutela del niño, de solo un mes, y ha iniciado los trámites para personarse como acusación particular si el proceso judicial abierto sigue adelante para defender los derechos de los menores. Los Mossos d’Esquadra siguen investigando el caso, analizando las pruebas médicas y la versión de los padres y otros familiares.
La DGAIA también ha retirado la custodia de sus tres hijos a la madre de una niña de tres años de l’Hospitalet de Llobregat por pegar a su hija con un cinturón, según adelantó ayer la cadena Ser. El esplai donde la menor realiza actividades detectó el lunes marcas rojas en el cuerpo de la niña, compatibles con una correa, y denunció el caso. La madre, que tras ser detenida y declarar ante el juez ha quedado en libertad, explicó que había castigado a su hija porque había puesto en la bañera a su hermano pequeño, un bebé.