Un millón de inquilinos buscan comprar un piso
Los alquileres sólo bajarán en los pisos de lujo, según Forcadell
Cerca de un millón de familias, de los tres millones que están viviendo en España en régimen de alquiler, están estudiando comprar una vivienda, según los datos de un estudio elaborado por la Universitat de Barcelona y la consultora inmobiliaria Forcadell. Gonzalo Bernardos, profesor de economía de la UB, explicó que la existencia de esta bolsa de demanda de compra, en un momento en que el empleo, los salarios y la economía mejoran y no se vislumbran subidas de tipos de interés hace prever la continuidad de la expansión inmobiliaria.
Ivan Vaqué, director general de Forcadell, explicó que los bancos han empezado a adoptar una política más flexible para permitir acceder al 30% de entrada, lo que también está impulsando las compras. “No vemos cerca el final del ciclo alcista del mercado”, recordó.
En el mismo sentido, un estudio de la inmobiliaria Solvia destacó ayer que sólo el 40% de los españoles considera que el alquiler ofrece ventajas sobre la propiedad, cinco puntos menos que en 2018 y el 72% de las personas que viven en alquiler lo hacen “forzados” porque no han podido acceder a la compra.
Esta situación, señala Forcadell, puede provocar bajadas de las rentas de alquiler más altas. “Los pisos con rentas de menos de 1.200 euros se alquilan en uno o dos días, porque hay una fuerte demanda, que no bajará”, explicó Toni López, director del área de empresa de la consultora. En cambio, a su juicio, las rentas más altas, que se pagan por pisos considerados de alto standing, sí podrían estabilizarse o incluso reducirse, hasta en un 5%, porque los inquilinos que pueden acceder a esas viviendas también pueden conseguir hipotecas para adquirir una propiedad.
El segundo motor del mercado siguen siendo los inversores, especialmente los particulares. “Con una visión a largo plazo, la rentabilidad de la inversión inmobiliaria sigue siendo mayor que la de otros activos”, recordó Vaqué. A su juicio, activos como las residencias de estudiantes o de ancianos, locales o naves logísticas pueden ser mejores opciones de inversión que la vivienda, aunque no sean tan solicitadas.
Las reformas en la ley de arrendamientos urbanos, que alargan la duración de los contratos y limitan la actualización de las rentas al IPC han tenido poco impacto entre los pequeños propietarios según Vaqué. No así entre los grandes propietarios, reconoció, que en algunos casos pueden replantearse su estrategia en España, pero que son apenas el 3% del mercado.
La reforma de la LAU, que impide cargar el coste de la agencia al inquilino cuando el propietario es una empresa, también ha impactado en las agencias (“hemos bajado precios a los grandes propietarios” reconoció Vaqué). Con la recuperación del mercado esos negocios se han disparado: el número de agencias se ha multiplicado por cuatro en dos años, aseguró López.
Los pisos de menos de 1.200 euros se alquilan en uno o dos días, y la fuerte demanda hará que no bajen de precio