Podemos ve en el giro del PSOE el camino expedito para crecer
Unidas Podemos ha pisado el acelerador tras el explícito corrimiento a la derecha del presidente en funciones, Pedro Sánchez, el pasado lunes en el debate televisado –donde combinó desdenes a Podemos, recetas punitivas para Catalunya y ortodoxia bruselense para su política económica– y se ha lanzado, no ya a consolidar sus números de abril, sino a tratar de seducir al electorado más progresista del PSOE que pueda sentirse huérfano por el giro ejecutado por Pedro Sánchez desde el 28 de abril.
El último vídeo de campaña lanzado ayer por Unidas Podemos, tomado del último mitin de Iglesias en Galicia apela en esencia al voto de los socialistas que habrían deseado un gobierno de coalición progresista y que se encuentran desconcertados con el giro de los últimos meses y su abjuración no solo de la coalición de gobierno sino de los acuerdos presupuestarios alcanzados hace un año. Las graves dificultades que el ingenio Más País está experimentando para despegar del suelo y el movimiento del PSOE trazando una limpia diagonal a estribor, hacia el ordenancismo conservador, Unidas Podemos ha visto ensancharse su carril para captar el voto de izquierdas.
En el vídeo, destinado a redes sociales, Iglesias es explícito con sus simpatizantes: “Hablad con vuestros amigos y familiares socialistas, decidles que nos den una oportunidad. Creo que hay mucha gente votante del PSOE, socialistas de corazón, que saben en lo más profundo de su corazón que o estamos nosotros en el Gobierno o su partido no va a hacer las cosas que ellos quieren que se hagan en este país,. como derogar la reforma laboral, publicar la lista de amnistiados fiscales, hacer una reforma fiscal progresiva, crear empresa pública de energía, respetar el derecho a la vivienda e intervenir el mercado del alquiler”. Todas ellas, firmadas por el PSOE en el acuerdo de presupuestos de hace un año.
La campaña de Pablo Iglesias, que anteayer pasaba por València y Barcelona, encara el tramo final con el humor mejorado. Su mitin de ayer en Bilbao también desbordó el aforo del Palacio Euskalduna e Iglesias salió, megáfono en mano, a pedir disculpas y dar las gracias a