Abascal espera una espectacular subida gracias al conflicto catalán
ha mostrado como una máquina poderosa en campaña, tanto en mítines y debates como en las líneas maestras de su discurso y su potente comunicación audiovisual, que ha inundado las redes sociales.
Todo pensado para detener “el plan de Sánchez”, que es el plan de los mismos que, recordó Iglesias, “le prohibieron pactar con nosotros en el 2016”. En Unidas Podemos están convencidos de que Pedro Sánchez fue demasiado explícito en su giro conservador durante el debate y desde el lunes se han ofrecido al votante socialista que confió en aquel Sánchez contrito y herido de Salvados .No tanto para arrebatarle la victoria como para obligarle a rectificar hacia políticas socialdemócratas: “Si nosotros estamos fuertes, Sánchez no podrá pactar con la derecha. Queremos un acuerdo con Sánchez, no porque confiemos en el PSOE, sino porque confiamos en España”, exclamó Iglesias, que había ironizado con el incendio que el líder del PSOE provocó con las asociaciones fiscales al pavonearse de ser su jefe: “Dijo que se había equivocado porque estaba cansado. Entonces entendí que si Pedro no duerme bien, está cansado y, si está cansado, sufre la separación de poderes en España”.
En el acto de cierre, que Montero e Iglesias convirtieron en una reivindicación de la política como “instrumento de los más para limitar el poder de los menos” –respondiendo al discurso antipolítico de Vox–, la alcaldesa de Barcelona quiso hacer de su presencia en Madrid un expresión de afecto y empatía contrarios a la “mala política que crea trincheras”. Emocionada, Colau también tuvo palabras explícitas para el presidente en funciones: “Es un secreto a voces que Sánchez ha recibido muchas presiones y se ha convencido de que no se puede. Pero sí se puede, Pedro, si se quiere sí se puede”.
El líder de Vox, Santiago Abascal, cerró anoche su campaña en Madrid en una plaza Colón repleta, 20.000 personas según la organización, sabedor de que puede ser uno de los grandes triunfadores de la noche electoral. Los altercados y protestas en Catalunya no han hecho más que alimentar las expectativas electorales del partido de ultraderecha, que se ha presentado como “el único que no pactará con Pedro Sánchez” y como el que propone medidas más duras contra el independentismo.
“Hay que detener a Quim Torra y llevarlo esposado ante los tribunales por el golpe de Estado permanente que está perpetrando en Catalunya”, señaló Abascal ayer por enésima vez en esta campaña. Vox plantea también aplicar el artículo 116 de la Constitución en esta comunidad, que prevé el estado de alarma, excepción y sitio. La formación quiere prohibir a los partidos independentistas y cerrar TV3.
Vox propone “recuperar de inmediato las competencias en sanidad, justicia y educación” para el Estado. El siguiente paso sería eliminar las autonomías en general. “Hemos llegado hasta aquí por la desigualdad del modelo de las autonomías que decían que serviría para apaciguar los ánimos de la secesión y ha sido todo lo contrario, se les ha engordado y se ha permitido que sus partidos sean legales”, afirmó Abascal, que sostiene que tras aplicar todas estas recetas “hay que iniciar las tareas de reconstrucción entre catalanes y entre catalanes y españoles”.
Abascal también ha rascado votos por la exhumación de Franco del Valle de los Caídos y sus anuncios contra la “inmigración ilegal” y a favor de reforzar la seguridad.
No todo fueron buenas noticias para Abascal ayer. La Junta Electoral le conminó a no impedir el acceso de los periodistas que no son afines a su formación como tiene por costumbre.