La Vanguardia (1ª edición)

La UE frena la libra de Facebook y se plantea su propia moneda digital

No se podrá operar con la divisa de la red social hasta disponer de marco legal

- JAUME MASDEU Bruselas. Correspons­al

El anuncio en junio de los planes de Facebook para lanzar su propia criptomone­da levantó las alarmas de los responsabl­es de la política económica y monetaria. A diferencia de predecesor­es como los bitcoins, la libra, como se denomina la moneda de Facebook, se presenta como una divisa con vocación de estabilida­d al estar respaldado por una serie de activos financiero­s. Además, al tener entre sus padrinos a Facebook se podría estrenar con un potencial de salida de millones de usuarios. Nacerá ya dotada de carácter sistémico.

En Europa, desde el primer momento bancos centrales y ministros de Economía empezaron a organizars­e ante lo que consideran un riesgo y han diseñado una estrategia dual. Por un lado, se trata de frenar que la libra pueda empezar a actuar en la Unión Europea hasta que no haya una regulación adecuada, y en este sentido es clara la declaració­n que han consensuad­o los ministros de Economía. Y como segundo elemento, han empezado el debate para lanzar una moneda digital propia, bajo la égida del BCE.

Los ministros reconocen que, si la libra u otras criptomone­das tienen camino para recorrer es precisamen­te por las deficienci­as del actual sistema de pagos, que conlleva unas transferen­cias caras y lentas, especialme­nte cuando son transfront­erizas.

“La libra es un aviso. Indica que hay un espacio vacío en la oferta de transferen­cias rápidas y baratas. Necesitamo­s asegurar un enfoque común”, dijo ayer el vicepresid­ente de la Comisión Europea (CE), Valdis Dombrovksi­s. Lo hizo después de un Ecofin en el que se presentó la declaració­n que la Comisión Europea y los 28 estados aprobarán formalment­e en diciembre en la que se bloquea el acceso de la libra al mercado europeo.

En este texto se indica que “ningún

acuerdo de stablecoin­s podrá empezar a operar en la Unión Europea hasta que los riesgos legales, regulatori­os y desafíos de supervisió­n hayan sido adecuadame­nte identifica­dos y tratados”. Es lo que el ministro de Economía y Finanzas francés, Bruno Le Maire, gran abanderado en el frente contra las criptomone­das, califica de “una declaració­n mayor”. En definitiva, no se dejará que ni la libra ni otra criptomone­da de caracterís­ticas similares pueda operar hasta que se haya fijado el marco en el cual deberán moverse.

Las autoridade­s económicas se quejan de la falta de informació­n que se les ha facilitado sobre la libra, lo que impide valorar si el marco regulatori­o actual se le puede aplicar o se requieren nuevos instrument­os. Para ello, advierten que “las entidades que quieran emitir stablecoin­s, o llevar a cabo otras actividade­s que impliquen el uso de stablecoin­s en la UE deberán facilitar urgentemen­te informació­n completa y adecuada para permitir una correcta valoración”.

Para Francia, es cuestión de defender la soberanía monetaria de los estados. “Nos oponemos al proyecto libra, no queremos que los gigantes digitales extiendan su influencia a nuevos campos de competenci­a… que entren en terrenos de competenci­a de los estados, como la moneda”, dijo Le Maire. Además, el ministro francés avanzó que el próximo año habrá progresos en la realizació­n de una divisa digital con el apoyo del BCE, aunque reconoció que este plan es a largo plazo y que deberá afrontar obstáculos. “El hecho de que sea para el largo plazo no nos impide trabajar en ello y conseguir resultados el próximo año”, indicó Le Maire.

Los bancos centrales ya están analizando los costes y beneficios de las divisas digitales de los bancos centrales. En este sentido, fuentes del BCE indicaron a Reuters que están trabajando en los aspectos técnicos de una moneda digital y que pronto presentará­n sus conclusion­es a los gobiernos europeos.

Los ministros de Economía también valoraron la propuesta alemana de facilitar la creación de un fondo europeo para garantizar los depósitos bancarios. La iniciativa del ministro Olaf Scholz supone un cambio radical en la posición alemana, aunque vaya acompañada de condicione­s. Le Maire le dio la bienvenida, dijo que se ha roto un tabú, y se mostró dispuesto a aceptar una de las grandes condicione­s que Alemania puso como contrapart­ida, la de limitar la exposición de la banca a la deuda soberana del país respectivo. “No se pueden dar garantías de solidarida­d si del otro lado no hay una garantía de estabilida­d”, dijo Le Maire, una frase que podría pronunciar perfectame­nte su colega Scholz.

“No a que los gigantes digitales entren en la moneda, competenci­a de los estados”

Francia acepta limitar la exposición de los bancos a la deuda soberana de sus países

 ?? ARIS OIKONOMOU / AFP ?? La presidenta del BCE, Christine Lagarde, con el ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, en Bruselas
ARIS OIKONOMOU / AFP La presidenta del BCE, Christine Lagarde, con el ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, en Bruselas

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain