Jornada de reflexión entre protestas
10-N Los actos del Tsunami transcurren en un ambiente festivo, mientras que la policía bloquea a los CDR
Mientras la convocatoria de Tsunami Democràtic se desarrollaba en un ambiente plenamente festivo, los Comitès de Defensa de la República (CDR) marchaban a partir de las siete de la tarde con un tono más reivindicativo hacia la Jefatura Superior de la Policía Nacional, en la Via Laietana de Barcelona. “Pasacalle hasta la biblioteca”, habían anunciado los activistas para ir ante el edificio de la policía, donde casi todas las manifestaciones independentistas se detienen para cantar: “Este edificio será una biblioteca”. “Urquinaona. ¡Lo volveremos a hacer!”, gritaban ayer en clara alusión a los disturbios que sucedieron el 18 de octubre pasado.
Todo ello no hacía presagiar una protesta tranquila. Pero sólo fue una impresión y los manifestantes no pudieron acercarse ni por asomo: los Mossos d’Esquadra les cerraron el paso en zona alejada, en la ronda Sant Pere y en la calle Fontanella. Ante la imposibilidad de avanzar, los CDR optaron por subir por el paseo de Gràcia e intentar acceder a la plaza Urquinaona desde otras calles de confluencia a la plaza. Sin éxito, porque andaron con la policía al lado, en paralelo, que perimetró la plaza a medida que la marcha, de unos 500 CDR, intentaba hacerse un hueco. Hubo lanzamiento de huevos y botellas de cristal contra los agentes de los Mossos y pequeñas y breves cargas policiales. Después los manifestantes se desplazaron y volcaron contenedores de basura por la calle Bailèn hasta llegar a Ali Beí. La rápida actuación de los Mossos para dispersarlos evitó que la situación fuera a más y se formaran barricadas. Mientras tanto, la Policía Nacional blindaba Urquinaona.
Fueron los únicos momentos de tensión en una jornada de reflexión que en general experimentó protestas pacíficas, incluso con un marcado tono festivo.
Tsunami Democràtic planteó el día de reflexión como una jornada de actividades diversas. El llamamiento fue correspondido y se hicieron acciones en más de 400 municipios de Catalunya. Quizá el acto más multitudinario fue en la plaza Universitat –7.000 personas, contó la Guardia Urbana–, donde coincidió con la acampada que desde hace días ocupa la calzada de Gran Via, y donde se montó un escenario
Los Mossos abortan la marcha de los Comitès de Defensa hacia Via Laietana para evitar disturbios
La concentración de Tsunami en la plaza Universitat reúne a 7.000 personas, según la Guardia Urbana