Dos vacunas con resultados similares
los que más nos interesan para protegernos pero a su vez más difíciles de analizar. Los anticuerpos se determinaron dos semanas tras la vacunación, lo que tampoco es mucho tiempo. No sabemos aún si persisten o no más allá de este periodo. Será necesario esperar a finalizar los análisis y poder estudiar la publicación de los resultados completos. Por tanto, mucha prudencia.
El segundo estudio, patrocinado por el Gobierno Chino y la compañía CanSino Biologics, lo publicó este fin de semana la revista The Lancet. Este estudio se llevó a cabo en China con 195 voluntarios, también empleando tres dosis diferentes de una vacuna frente al SARS-CoV-2. La vacuna fue bien tolerada y segura. Se determinó en todos los voluntarios la presencia de anticuerpos que se unían al virus y de anticuerpos neutralizantes. Ambos alcanzaron un pico a las 4 semanas posvacunación. También se observó la existencia de una rápida respuesta inmunitaria específica de células T. El estudio continuará 6 meses más. No sabemos aún qué papel juega cada tipo de inmunidad (anticuerpos y/o células T) para lograr una protección más efectiva. Se trata del primer estudio de esta vacuna en seres humanos y su objetivo era determinar la seguridad de la misma. La interpretación de estos resultados está limitada por el número bajo de voluntarios, la corta duración del seguimiento y la ausencia de un grupo control. Aunque este estudio incluye más voluntarios y más datos que el estudio americano citado, la frase final de la publicación es prudente: los resultados sugieren que esta vacuna merece seguir investigándose.
@ToniTrilla