El elogio público de Illa y Simón
Al tiempo que anunció el inminente final del estado de alarma que decretó el 14 de marzo, Sánchez rindió un “elogio público” a las dos figuras que más lo han personificado y que ahora son objeto de querellas por su labor. “Un aragonés y un catalán”, dijo, en referencia al doctor Fernando Simón y al ministro Salvador Illa. Del primero señaló que no le conocía antes de esta crisis, “y fue además designado por otro Gobierno”. “En las horas más extremas, en los momentos más oscuros, siempre le he visto entregado a su trabajo y al bien común, pensando en el país más que en sí mismo, hasta cuando estuvo infectado por el mismo virus que combatía”, resaltó. “Le he visto trabajar hasta la extenuación y soportar estoicamente el desdén de los más ignorantes, las críticas más descabelladas”. “Y nunca se ha dejado arrastrar por la provocación, ni una sola vez”. Lo mismo dijo sobre Illa: “Nunca ha fallado ni desfallecido”. Aunque también “ha soportado las peores descalificaciones, los insultos más mezquinos, y jamás ha perdido la compostura ni se ha permitido una sola mala palabra”.