La UE califica de “abuso de poder” la muerte de Floyd
“Las vidas negras también cuentan”, dice Josep Borrell
Josep Borrell no tuvo pelos en la lengua para calificar lo que ha pasado en Estados Unidos. “Se trata de un abuso de poder. Hay que denunciarlo, combatirlo, en Estados Unidos y en todas partes”, dijo ayer el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior al referirse a las circunstancias en que murió Georges Floyd, un afroamericano que falleció ahogado por la rodilla que un policía blanco en Mineápolis mantuvo apoyada en su cuello durante varios minutos.
Esta muerte, que está provocando una oleada de protestas en distintas ciudades norteamericanas por el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía, ha conmocionado a la Unión Europea, según Borrell. “Aquí, en Europa, estamos conmocionados y consternados por la muerte de George Floyd, como la población de Estados Unidos. Creo que todas las sociedades deben seguir vigilantes contra al uso excesivo de la fuerza por parte de los guardianes del orden”, dijo Borrell, para añadir que “debemos asegurar que en todas partes y en particular en las sociedades fundadas en el Estado de derecho, la representación democrática y el respeto a las libertades, las personas encargadas de mantener el orden no utilicen sus capacidades como ha sido el caso en la muerte muy desafortunada de George Floyd”. Una crítica a la actuación de la policía norteamericana, acompañada de apoyo explícito al derecho a manifestarse pacíficamente y de una frase emblemática: “Todas las vidas cuentas. Las vidas negras también cuentan”.
Por otro lado, Borrell recordó al presidente norteamericano, Donald Trump, que no tiene la capacidad para cambiar el formato del G-7 para incluir a Rusia. El sábado, Trump anunció que aplazaba la cumbre del G-7 prevista en junio en Estados Unidos a causa del coronavirus, al mismo tiempo que calificó el actual formato de desfasado y anticipó su intención de invitar a participar a otros países, entre los cuales Rusia. Ante estos anuncios, la Unión Europea recuerda que Trump no puede decidir por su cuenta la participación de Moscú. “La presidencia del G-7 tiene prerrogativas. Los Estados Unidos pueden lanzar invitaciones puntuales, reflejo de prioridades, pero el cambio de formato no es una prerrogativa de la presidencia”, dijo el alto representante de la UE:
Rusia fue excluida de lo que se denominaba el G-8 en el 2014 por la anexión de Crimea, acto denunciado como ilegal por los países occidentales. En aquel momento, en la declaración de la Haya se precisaron las condiciones para un eventual retorno de Rusia, que pasan porque Rusia “cambie de rumbo y que el contexto se preste de nuevo a un debate constructivo en el seno del G-8”. “No es el caso actualmente”, sentenció Borrell, cerrando la puerta al retorno de Putin a una reunión en que Donald Trump está muy interesado en invitarle.
La Unión Europea se opone a que Rusia pueda volver al G-8, como pretende Donald Trump