Reforma del muelle de Espanya
La construcción del Liceu ■
Mar es la primera pieza de un replanteamiento integral del muelle de Espanya, que hace años ha perdido fuelle y que el puerto de Barcelona quiere revitalizar. Para ello tiene encima de la mesa varios proyectos. Uno es la remodelación del centro comercial Maremàgnum, que su dirección quiere renovar y convertir en un equipamiento más abierto. Un segundo paso es el derribo de los viejos cines de Cinesa, que como el Imax están en desuso, en su caso desde el 2015, y que permitirán ampliar la contigua plaza de la Odissea. Finalmente, se reurbanizará todo el espacio. También se trabaja en transformar la conexión con el paseo Colom y su continuidad con la Via Laietana, que se quieren fomentar como acceso peatonal a la zona para descongestionar el de la rambla de Mar. 1995.Tiene2.250m2 desuperficie en planta sobre un suelo destinado a usos comerciales, culturales y recreativos. Tras sufrir una fuerte crisis de espectadores, el 2014 cesó su actividad. El puerto recuperó en el 2020 la concesión, que expiraba el 2024, poco después de que el inmueble, ya deteriorado y ocupado por una veintena de personas sin techo, sufriera un incendio. Entonces decidió derribarlo y buscar un nuevo uso al solar. Pero antes ha explorado reaprovecharlo para actividades culturales o científicas. En una entrevista con este diario el pasado diciembre, el presidente de la autoridad portuaria, Damià Calvet, avanzó que contaba con dos propuestas. Finalmente se demolerá y se construirá un nuevo equipamiento pensado para las necesidades del Liceu, que era uno de esos dos candidatos. De hecho, el puerto ya ha activado el derribo. En el caso de que el proyecto prospere, el Gran Teatre sería el titular de una nueva concesión y promovería con sus recursos la construcción.
El desembarco del Liceu en terrenos portuarios tuvo un episodio fallido el pasado mayo a través de una alianza con los promotores de la franquicia del Hermitage en Barcelona para participar en el