La CEOE carga contra Escrivá por los fondos de pensiones
Mandará una carta de protesta al ministro y a la vicepresidenta Calviño
cultad en los mercados, de forma que la política monetaria expansiva sea efectiva. Lo demás es relativo para el BCE, empezando por una inflación que se sigue considerando exógena, importada y transitoria, aunque no tanto...
¿Y los efectos secundarios? Guindos puso el dedo en la llaga al resaltar ayer, de nuevo, la importancia de no perder de vista los riesgos sistémicos. “Ante la evolución del mercado residencial de vivienda, la evolución del ciclo de empresas y de los hogares, creo que tenemos que empezar a plantearnos la posibilidad de volver a implementar las medidas macroprudenciales en el espacio bancario”, dijo el exministro de Economía en un acto organizado por Bruegel, el Banco Asiático de Desarrollo y el propio BCE. La sobrevaloración en ciertos mercados residenciales “está siendo cada vez más extendida”, admitió. El plan es tratar de limitar la oferta de crédito y, para ello, el BCE se plantea empezar a reconstruir los colchones de capital de los bancos y que presten menos.c
La escena fue sorprendente. Con el comité ejecutivo de la CEOE reunido este miércoles hablando sobre la reforma laboral, su presidente Antonio Garamendi interrumpió la discusión para anunciar que el Gobierno pretendía aprobar el fondo público de pensiones en el Consejo de Ministros del próximo martes. El anuncio encendió los ánimos de una patronal que se ha mostrado desde el inicio opuesta a puntos destacados de este proyecto con el que el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, quiere potenciar los planes de pensiones de empresa por encima de los individuales.
El propio Garamendi se preguntó qué tenían que hacer, si tocaba levantarse de la mesa, a lo que sucedieron una serie de intervenciones duras contra lo que consideran una muestra de falta de diálogo por parte del Gobierno sobre esta propuesta. Fue el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, quién frenó la escalada verbal, planteando que no tocaba abandonar ninguna negociación y a partir de ahí, la decisión se recondujo al envío de dos cartas, una a la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Economía, Nadia Calviño, y otra al ministro Escrivá, para manifestar su descontento con las formas con que se está llevando esta negociación.
Fue el martes por la tarde cuando el Gobierno envió un nuevo redactado a los agentes sociales, para que lo discutieran el miércoles, por cierto, a la misma hora que la ejecutiva de la CEOE, y según fuentes de la patronal, incorporó su intención de aprobarlo ya la próxima semana. “El fondo no gusta, pero las formas menos. Tanto que no se va analizar el fondo mientras las formas sigan siendo éstas”, dicen fuentes de la patronal, que consideran que este episodio colma el vaso de la paciencia de unas negociaciones con Inclusión que siempre han sido difíciles.
Por su parte, desde el ministerio de Inclusión señalan que en estos momentos no tienen
Cuando Garamendi dijo que el Gobierno planeaba aprobarlos el martes, hubo voces reclamando levantarse de la mesa de diálogo
previsto llevarlo al Consejo de Ministros de la próxima semana, y que en el último redactado, han incorporado iniciativas planteadas por la CEOE, como algunas referidas a la gobernanza y al régimen de inversiones. También mantienen que la Comisión de Control Especial, que es el eje central del seguimiento de los fondos, tiene una composición equilibrada entre sindicatos, empresarios y Gobierno.
Entre las discrepancias que mantiene la patronal con este proyecto está lo que consideran un exceso de intervención pública en el control de los fondos.c