Una madre y su hijo mueren abrasados en un pueblo de luto por otro incendio mortal

Moncada, en València, vive con perplejidad un nuevo suceso luctuoso. Apenas tres días después de que el municipio lamentara las muertes de seis ancianos en un geriátrico cercano al ayuntamiento, otro incendio mortal ha enlutado la localidad.

Una mujer de 79 años y su hijo, de 56, han fallecido en la madrugada de este sábado en un incendio declarado en su vivienda. El aviso del suceso se recibió a las 5.20 horas. Ya no se pudo hacer nada. Cuando los bomberos, la policía local y los servicios sanitarios llegaron al lugar, las llamas devoraban uno de los pisos de la quinta planta.

Un detalle refleja la voracidad del incendio. Enrique Giménez, el vecino que vivía en la vivienda de al lado, ha explicado que su casa ha quedado “inhabitable” y “negra como el carbón” por el humo. El calor derritió hasta los fusibles de la entrada, por lo que este hombre y su familia pasarán el fin de semana en un hotel a la espera de que los peritos revisen el inmueble, el próximo lunes.

En el piso vivían una mujer y su hijo, que al parecer tenía las facultades mentales perturbadas. Junto a sus cuerpos calcinados apareció la mascota de la familia, un perro. Un equipo de policía judicial de la Guardia Civil se ha hecho cargo de las investigaciones. Todo apunta a un suceso intencionado.

Según los vecinos, el hijo tenía problemas de salud mental y la Policía tuvo que acudir en varias ocasiones a la vivienda por discusiones familiares. Se da la circunstancia de que otro miembro de esta familia, la hija de la fallecida, provocó hace diez años otro incendio. Aquella vez, sin embargo, las llamas, que se originaron al prender fuego a un colchón, se pudieron controlar rápidamente. La pirómana reside desde hace tres años en una vivienda tutelada.

Estos hechos se producen tres días después del incendio en una residencia de ancianos del municipio, en el que fallecieron seis internos y otros diez residentes tuvieron que ser hospitalizados, tres muy graves.c