El Rey respira “hispanidad”
La estatua de Juan Ponce de León, derribada y partida en dos el pasado lunes por un grupo independentista en protesta por la presencia del Rey de España, volvía a estar ayer en pie y entera. En una rápida operación de restauración la figura de hierro fundido se cosió con unas grapas gigantes y quien fue primer gobernador de Puerto Rico y fundador de San Juan en 1521, estuvo sobre su pedestal cuando la ciudad, en presencia de Felipe VI, celebró la efeméride.
La presencia de Felipe VI en los actos conmemorativos del 500.º aniversario de la fundación de la capital portorriqueña se convirtió ayer en un homenaje a la historia compartida durante 400 años. Pero no solo fue el Rey quien, tanto al recibir la llave de la ciudad, como en otros parlamentos , defendió el modelo de presencia de España en América, lo hicieron, con mayor ahínco aún, las autoridades de Puerto Rico, orgullosas de mostrar su herencia española. El Rey recordó que en las primeras ciudades fundadas, en América tras 1492 (San Juan, Santo Domingo, Panamá, La Habana, Cartagena de Indias, entre otras), España impulsó edificaciones, instituciones de gobierno, universidades, escuelas, hospitales, además de aportar “su lengua, su cultura y su credo.”
Toda esa herencia “debe servirnos”, añadió el Rey, “para que miremos juntos al futuro, orgullosos del empuje de la comunidad hispana en Estados Unidos”. Mientras Felipe VI se refería explícitamente a Puerto Rico como parte de Estados Unidos, el alcalde de San Juan, Miguel Romero, hizo un canto a historia compartida con España de la ciudad y de la isla y en ningún momento mencionó su pertenencia administrativa a
Estados Unidos. Puerto Rico fue territorio español hasta que en 1898 pasó al dominio de Estados Unidos, con diversos estatus a lo largo de los años. Actualmente es un Estado Libre Asociado y funciona en un régimen de autogobierno pero aunque los portorriqueños son ciudadanos estadounidenses, no pueden votar en las elecciones a la Casa Blanca.
Miguel Romero, que el lunes tras el derribo de la estatua de
Ponce de León, defendió el derecho de los movimientos independentistas pero condenó los actos vandálicos, llamó “madre patria” a España pero no hizo referencia alguna a sus ‘hermanos’ estadounidenses.
En un clima de cordialidad y cercanía extrema se celebró un Foro Empresarial en el que se repasaron las oportunidades de negocios conjuntos, principalmente en el sector turístico. A pesar de sus encantos naturales y herencia colonial, Puerto Rico no tiene la estructura hotelera de República Dominicana e incluso de Cuba, y España, líder mundial del sector, puede jugar, más que las empresas estadounidenses, un papel fundamental.
Las autoridades de Puerto Rico exhiben sin reparos el orgullo por su herencia española
Con este viaje, el Rey ya ha realizado tres visitas a Puerto Rico, cuyos representantes, en nombre de todos los ciudadanos, recibieron en 1991 el premio Príncipe de Asturias de las Letras tras declarar al castellano único idioma oficial del país. Puerto Rico no olvida, ni reniega de su herencia española, por eso ayer el Rey, además de animar a visitar el país, afirmó que paseando por sus calles había respirado “hispanidad”.c