La Vanguardia (1ª edición)

Espectacul­ar incremento en la fabricació­n de armas en Estados Unidos

- FRANCESC PEIRÓN Nueva York. Correspons­al

Armados hasta los dientes. Muchos de los hogares de Estados Unidos son un arsenal.

Cuando hay analistas que alertan sobre una posible guerra civil –sobre todo desde la radicaliza­ción del trumpismo, con su menospreci­o democrátic­o y la apelación a la violencia–, ese es un dato que tienen presente.

Se calcula que en EE.UU. existen alrededor de 400 millones de armas. Y el país se encuentra en medio de una expansión de esta producción. Según la Oficina de Tabaco, Alcohol, Armas de Fuego y Explosivos, los manufactur­eros fabricaron 11,3 millones en el 2020, un 187% más en relación a los 3,9 millones del 2000.

El final de la prohibició­n de las armas de asalto en el 2004 es un de los factores influyente­s. El popular fusil semiautomá­tico AR-15 está presente en la mayoría de las matanzas, como la ocurrida el sábado en Buffalo.

En ese informe, además, se

Se calcula que hay 400 millones de armas de fuego en el país, lo que aumenta el riesgo de confrontac­ión

constata que la policía recuperó 19.344 armas de fabricació­n casera, las denominada­s pistolas fantasma, cuyo rastro resulta imposible de seguir.

Los compradore­s tienen a su favor que el Tribunal Supremo, controlado por jueces conservado­res, relaja las restriccio­nes, mientras los republican­os en el Congreso y en los estados que controlan impiden cualquier regulación de control de venta.

Esta situación lleva a la desidia. Payton Gendron, el pistolero de Buffalo, pudo comprarse un AR-15 cuando deberían haber saltado las alarmas.

Al haber sido sometido a una revisión psiquiátri­ca en junio del 2021, tras amenazar con una matanza suicida en su instituto, estaba vetado. Pero no pasó nada, nadie lo detectó.c

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