New Jerseys enquistadas

Aveces los representantes políticos establecen objetivos que las administraciones no pueden asumir. El proceso de consolidación definitiva de las terrazas dispuestas de manera extraordinaria en Barcelona durante la pandemia está resultando mucho más farragoso de lo esperado, al menos de lo en principio esperado por el gobierno de la alcaldesa Ada Colau. Cuentan en los pasillos municipales de Sant Jaume que meses atrás, tras enterarse de las previsiones del ejecutivo sociocomún, más de un técnico municipal se llevó las manos a la cabeza. Además, el índice de solicitudes denegadas está siendo sorprendentemente alto. Al menos a los restauradores les sorprende. Y también les inquieta. Este celo del Ayuntamiento no se corresponde con los compromisos adquiridos con el sector. Probablemente muchas denegaciones sean recurridas y revisadas. De este modo este desencaje seguirá siendo bien visible en el espacio público de la ciudad, no hará otra cosa que demorar un poco más la despedida definitiva de las barreras de hormigón tipo New Jersey.c