Crece la alarma ante la expansión de la viruela del mono en Europa
En España hay 7 casos confirmados y 29 sospechosos en Madrid y Canarias
La alerta por la viruela del mono se va ampliando y preocupa a las autoridades sanitarias su expansión por Europa y América sin que los científicos encuentren aún una explicación. A los casos del Reino Unido, Portugal y España, ayer se sumaron casos en Suecia e Italia, además de en Estados Unidos, Canadá y Chile. En España, las cifras siguen en aumento: 7 casos confirmados y 29 en estudio, todos ellos en Madrid salvo un caso bajo sospecha en Canarias. Todos presentan un cuadro leve. El Ministerio de Sanidad reportó ayer 24 casos sospechosos en total porque aún no habían llegado las muestras al Centro Nacional de Microbiología.
Italia confirmó su primer caso y estudia otros dos más de jóvenes que habían viajado al archipiélago. Se investiga si estas infecciones están relacionadas. El Reino Unido fue el primer país que vio a pacientes de esta inusual infección; dio la alerta el día 7, y cuenta con otros nueve casos confirmados.
La expansión de casos ratifica la idea de que hay transmisión comunitaria (el virus circula) en varios países, porque además, muchos de los pacientes no están relacionados entre sí (o sea, se contagiaron a través de otras personas).
El hecho de que algunos de los infectados sean hombres que han tenido sexo con otros hombre hizo extender la equívoca idea de que esta infección está relacionada con la homosexualidad, aunque no se descarta nada, añaden expertos consultados por este periódico. “Todo está en estudio”, señalan. El Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC) indicó que la viruela del mono no es una enfermedad de transmisión sexual. El virus se contagia por el contacto físico estrecho, sobre todo con las pústulas que causa la infección, también por los fluidos o por gotas de saliva de un tamaño grande (o sea, el cara a cara próximo).
El ECDC admite que “dada la inusual frecuencia de transmisión entre humanos” de los actuales brotes y la probable transmisión comunitaria, debe considerarse alto el riesgo de contagio en actividades de mucha proximidad física, como al mantener relaciones sexuales o convivir con una persona infectada, mientras que el riesgo de contagio es bajo si no hay contacto estrecho entre personas.
En España no se había declarado nunca un caso de viruela del mono, infección identificada en África en 1970. En el Reino Unido, por ejemplo, hubo siete casos en los últimos cuatro años (20182021).
Ante los brotes actuales, el virólogo del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) Mariano Esteban abogó ayer por vacunar a los contactos estrechos de las personas contagiadas por el virus de la viruela del mono antes de que desarrollen síntomas como método más rápido para controlar la transmisión. Así es como lo establece la OMS, de cuyo Comité
Asesor sobre Viruela forma parte, y también lo aconsejó ayer mismo el ECDC, que en un comunicado ha planteado que “si hay vacunas contra la viruela disponibles en el país, la vacunación de contactos estrechos de alto riesgo debería ser considerada después de un estudio de beneficio de riesgos”.
Existen dos vacunas disponibles que podrían aplicarse, explicó Esteban a Efe: una es la de la viruela humana tradicional, que se dejó de administrar en la década de los ochenta pero que solo está autorizada por la agencia reguladora estadounidense, la FDA. Y la otra es Imnavex, autorizada por la
Los expertos evalúan la causa de que el virus esté afectando por el momento solo a hombres jóvenes