En los Andes del Perú
Una exposición en Foto Colectania y un libro reivindican la obra fotográfica de Martín Chambi
da, en cualquier caso no sometida a los conquistadores castellanos que buscaban Eldorado con ávida fiebre de oro. Otra explicación, en clave realista, seguramente la entenderán más fácilmente quienes conozcan la geografía cultural precolombina. Y es que, desde México hasta los Andes del Perú y más al sur, es un hecho que en algunos países hay ruinas escondidas bajo selvas, o bajo tierras más áridas igualmente no exploradas. Por ejemplo, cuando en 1985 visité lo que antaño fue la extensa ciudad maya de Cobá, en la península del Yucatán, me sorprendió la abundancia de montículos simétricos que, al caminar, iban apareciendo de vez en cuando, no lejos de las sendas, y que contrastaban con el terreno llano. Parecían colinas, pero en realidad eran pirámides o construcciones enterradas y escondidas por la selva. Unos lugareños me dijeron que a veces llegaban, desde lejos, helicópteros, con “arqueólogos gringos que buscaban tesoros” y que se llevaban lo que podían, furtivamente. Y el gobierno mexicano no tenía presupuesto ni para explorar ni para vigilar tanta extensión con tanta ruina valiosa.
En 1913 la revista estadounidense National Geographic Magazine publicó un número especial que incluía 240 fotografías de
El proyecto de este fotógrafo peruano era expresar la dignidad humana y la grandeza de su país
El indio ll la ciudad perdida y encontrada del Machu Picchu, pero las fotos de la expedición liderada por Hiram Bingham eran documentos que no se autoexigían el nivel artístico que posteriormente alcanzó Martín Chambi (1891-1973). La exposición que presenta Foto Colectania con el título Martín Chambi y sus contemporáneos. Los Andes fotografiados (hasta el 12 de junio), reúne más de cien fotografías de época de Chambi y de otros autores –entre ellos Robert Frank e Irving Penn– que trabajaron en los mismos lugares antes o después de él. Todas las obras pertenecen a la espléndida colección de Jan Mulder. Y la muestra coincide con la previa publicación del libro Martín Chambi. Fotografía, muy bien editado por la editorial RM.
Las fotos de Chambi transmiten la fuerza de lo que es genuino. El proyecto de este fotógrafo peruano era expresar la dignidad humana y la grandeza cultural, arquitectónica, de su país. Chambi es un fotógrafo excelente en diversos registros. Se puede disfrutar tanto ante una composición suya basada en la entrada de la luz solar en una cueva funeraria (en Machu Picchu, 1928) como en otra donde dialogan la armonía mineral con el orden geométrico de la piedra tallada (Trono del Inca, Sacsahuamán, 1928).
La gelatina de plata otorga a ciertas imágenes una calidad especial. Así sucede, por ejemplo, en Balseros en el lago Titicaca ,de 1925. En otras fotografías el misterio surge del diálogo a contraluz entre nubes luminosas y cuerpos o árboles sombríos. En El indio y su llama (1923), hombre y animal parecen unidos al cielo. Pero es quizá el autorretrato con paisaje panorámico titulado En las alturas de la montaña de Sachapata, (1925) la imagen de esta muestra que da más ganas de viajar, y con cámara fotográfica.c