Una genialidad enfermiza
el a veces injustamente menospreciado dino Risi decide colocarlo al lado de Vittorio Gassman en La escapada, una película mítica. Su éxito internacional entre el público y también sectores de la crítica facilitaron una vertiginosa carrera internacional para este actor siempre presuntamente asustado pero capaz de las mayores proezas tanto en el terreno interpretativo como en el personal. Todo era realidad o fantasía, fantasía o realidad en su universo de intérprete versátil. En 2001 se había declarado totalmente hastiado del ámbito cinematográfico: “En el cine se espera mucho y yo ya no tengo tiempo, el cine me cansa”. Pero el cine le sumergió en las aguas del éxito cuando en 1956 Roger Vadim, el primero de los cuatro maridos de brigitte bardot, le sitúa al lado de ella en Y Dios creó la mujer. inquietante, sarcástico y al margen de las convenciones, la oblicua figura de Jean-Louis Trintignant será utilizada por directores como Claude Lelouch, Pierre-Granier deferre, Costa-Gavras, Michael Haneke... Su talento y sus contradicciones no tenían límite.