Mango cede sus tiendas en Rusia a los franquiciados y deja sus negocios directos
El traspaso de los 55 establecimientos propios se hace por un precio testimonial
Mango, la compañía de moda propiedad de Isak Andic, abandona sus operaciones directas en Rusia de forma definitiva, han confirmado fuentes de la empresa, sumándose así a una larga lista de empresas occidentales que echan el cierre en Moscú. El grupo textil ha llegado a un acuerdo con varios de sus socios franquiciados para cederles su negocio en el país, donde ya suspendió ventas en sus 55 establecimientos propios y en el e-commerce en marzo, nada más comenzar la invasión rusa de Ucrania. Unas 53 tiendas franquiciadas de Mango en Rusia sí han seguido abiertas durante este tiempo, aunque la compañía no les ha proveído de mercancía. De hecho, la firma fundada en Barcelona seguirá con esta política comercial. No proveerá a las franquicias en Rusia directamente, y éstas deberán asegurarse el stock a través de sus propios medios, mediante intermediarios.
Para Mango, la salida directa de Rusia supone un paso de calado. El país estaba entre sus cinco principales mercados antes de la guerra y, al cierre del 2021, aportó el 8% del resultado neto de explotación (EBIT). Ahora, su expansión en el país queda aparcada. El traspaso de las 55 tiendas propias se ha cerrado por un precio testimonial, que no ha sido desvelado por el grupo. El proceso se llevará a cabo de forma gradual, y mediante una negociación con cada uno de los diferentes socios con los que cuenta en Rusia. La semana que viene se cederán los dos primeros puntos de venta, a los que seguirán, previsiblemente, 22 más entre junio y julio, mientras la compañía continúa negociando “para buscar la mejor opción para sus empleados y partners en el país”, han explicado. El personal de las tiendas propias –unas 800 personas– será absorbido por los socios de Mango, así como los compromisos con otros proveedores en el país. Más adelante se traspasarán el resto de tiendas.
La marcha de Rusia contrasta con la evolución del negocio de Mango en Ucrania. La compañía también cerró sus 14 tiendas en el país en marzo, pero ahora ha reabierto nueve de ellas, cuatro propias y cinco de franquiciadas. A lo largo de las próximas semanas, continuará retomando la actividad de nuevos puntos de venta “teniendo en cuenta todas las medidas de seguridad”, han subrayado.
Con el objetivo de velar por la salud y seguridad de sus equipos y clientes, Mango cerró el pasado 24 de febrero sus 14 tiendas en Ucrania (tanto propias como franquicias) de forma temporal. En Ucrania, la compañía ofreció a aquellas personas que decidieron abandonar el país asesoramiento jurídico y un nuevo puesto de trabajo en otro lugar.
Las medidas que se toman en este país, de todos modos, están en constante evolución y dependen de la evolución de la guerra.c