EL EPO TAJE

Italia reivindica al gran revolucionador de la escultura, quien recuperó la tradición antigua para aportar nuevas soluciones técnicas y ofrecer una mirada humanista

primera vez salen de su lugar de origen, aquél para el que fueron creadas, como las puertas de bronce de la sacristía vieja de la iglesia de San Lorenzo de Florencia, encargo de los Medici, o el relieve Banquete de Herodes, la Fe y la Esperanza de la fuente bautismal de Siena.

Y todo ello para dar una visión de lo que significó la obra del florentino en el albor del Renacimiento. En sus inicios trabajó en el taller de Ghiberti y sus primeras obras permiten comprobar el paso de la vieja escuela medieval a los nuevos aires creadores que junto a Brunelleschi fue a respirar a Roma, donde tomó nota del pasado clásico. La recuperación de la antigüedad para ponerla al día