El Kielce de Dujshebaev, la piedra de los tropiezos más recurrente
El campeón polaco se deshizo del Veszprém (35-37)
El Barça volverá a encontrarse con Talant Dujshebaev, lo más parecido a su bestia negra, sobre todo en sus buenos tiempos en el Ciudad Real y el Atlético de Madrid. Su Kielce, campeón en el 2016, ha sido el mejor equipo en la temporada regular y el único capaz de ganar dos partidos al Barça, ambos seguidos en noviembre, a la vez que ponía fin a la racha de seis años invictos en el Palau tras 46 partidos sin perder. El anterior en asaltar el templo fue precisamente él, Talant y su Kielce.
Fue el momento más delicado que vivió Carlos Ortega, ya que su equipo acumulaba en tres meses cuatro derrotas (Kielce 2, Veszprém y en la final del Mundial de clubs contra el Magdeburgo).
En la primera semifinal, el Kielce fulminó al Veszprém (35-37) en un gran segundo tiempo en el que le dio la vuelta al partido. Los húngaros tenían controlado el duelo (18-16 al descanso) después de gozar de hasta 4 goles de ventaja gracias a un Corrales inspiradísimo con 12 paradas y un 38% de acierto. Sin embargo, al inicio del segundo tiempo, la expulsión con roja directa de Blagotinsek debilitó al Veszprém, que se quedó sin su gran baluarte defensivo. El equipo húngaro cayó en picado: del 20-19 pasó a un 20-23; el parcial que clavó fue de 2-7 en los primeros 9 minutos. Con el marcador favorable, Dujshebaev puso el ritmo que más le convino y se aferró a los goles del extremo Moryto (8) y del central Karacic (5). Incluso no necesitó que el portero Wolff estuviera demasiado brillante (9/28, 23%).
Para el Kielce será la segunda final en sus cinco final four . En la primera se coronó en el 2016 ante el Veszprém (39-38). Dujshebaev persigue la 4.ª Champions después de las tres ganadas con el Ciudad Real y la del 2016.c