Contra el peso de los precedentes para poder subir en Tenerife
Los de Míchel, sin Borja García, necesitan marcar
El Girona afronta contra el Tenerife la vuelta de una nueva final del playoff de ascenso a Primera con el objetivo de acabar con el maleficio que les ha impedido conseguirlo hasta ahora. Los gerundenses han disputado cuatro finales en la última década y, de momento, en ninguna de ellas ha salido cara. “No tenemos que pensar en estos precedentes porque sería ponernos dentro de uno espiral negativo que nos privará de dar la mejor versión. Y nosotros la daremos. Estoy convencido”, aseguraba de forma muy contundente ayer el entrenador Míchel Sánchez. El Girona solo será equipo de Primera si gana.
“Hemos contemplado todos los escenarios de partido y tenemos un plan. Me espero un Tenerife más agresivo que en la ida y, teniendo en cuenta que nosotros también tenemos que ir a por el partido, porque necesitamos ganar, me imagino un duelo con muchos goles”, vaticina el técnico.
Todo al contrario, pues, de lo que se vivió en Montilivi hace una semana, ya que el partido acabó con empate a cero y con solo un equipo, el Girona, buscando la victoria ante unos canarios muy conservadores que tan solo remataron una vez entre los tres palos. Los gerundenses, en cambio, lo intentaron en hasta 16 ocasiones aunque sin acierto. “Esa es una de las cosas que tenemos que mejorar. Tenemos que intentar generar más ocasiones de gol porque necesitamos marcar”, remarcaba el técnico madrileño. No le falta razón. Los catalanes solo han sido capaces de marcar un gol al Tenerife en las tres veces que se han enfrentado esta temporada y en los tres casos no han podido ganar. Malos precedentes.
Habría ayudado al menos que Borja García, quien inició la remontada en Ipurúa en las semifinales contra el Éibar, se hubiera recuperado a tiempo, pero el madrileño no está para jugar y una buena muestra fue la aparatosa prótesis ortopédica con la que se presentó en el aeropuerto de Girona para viajar. Míchel lo ha incluido igualmente en la lista de 27 convocados aunque también hizo subir al avión a los lesionados de larga duración Ibra Kebé o Sarmiento para cerrar filas.
Hoy viaja el grueso de los 300 aficionados gerundenses que habrá en las graderías del Helidoro Rodríguez López, con capacidad para más de 22.000 espectadores y que estará lleno. Nadie se quiere perder esta cita que silbará el manchego Arcediano Monescillo, curiosamente, el árbitro del partido del ascenso del Girona a Primera División en el 2017. En el VAR, en cambio, estará Ocón Arraiz de no tan buen recuerdo para los gerundenses después de algunas polémicas en el pasado.c