La Cambra cita a los titulares de las ‘sillas de pago’ para cambiar el sistema
Roca plantea reducir a un máximo de dos el acceso directo de grandes corporaciones Rousaud estudia presentarse a las elecciones
Las llamadas sillas de plata, los escaños en el pleno de la Cambra de Comerç de Barcelona que se obtienen a cambio de una aportación económica, podrían tener los días contados. Mònica Roca, la presidenta de la institución, mantiene desde hace días una ronda de contactos con las grandes corporaciones que ocupan uno de esos escaños para explicarles su plan de reforma con objeto de llevar su propuesta al pleno previsto para el próximo día 29. Pese a ello se intenta conservar los ingresos que aportan las grandes corporaciones convirtiéndolas en una nueva figura: socios institucionales, una especie de patrocinadores que no formarían parte del pleno y, por lo tanto, no tendrían derecho a voto. Pero a cambio participarían en comisiones o grupos de trabajo, donde podrían tener capacidad de influencia.
Pese a los reiterados intentos de este diario Mònica Roca ha rechazado hacer comentarios sobre la reforma, que ya ha comunicado personalmente a más de la mitad de los afectados. Quedan en la actualidad 11 sillones de pago tras la renuncia hace un año de Naturgy,
Catalonia Hotels y Abertis, que alegaron motivos económicos y organizativos. Con anterioridad, ya se había producido otra baja, la de Magma Disseny, que ni siquiera llegó a tomar posesión del puesto en 2019 tras conocer la amplia victoria de la candidatura independentista Eines de País encabezada entonces por Joan Canadell. Sin embargo, la Cambra consiguió cubrir el puesto de Magma Disseny con el Gremi d’Hotels de Barcelona, representado por Eduard Torres, hoy presidente de Turisme de Barcelona. Para las bajas de Naturgy, Catalonia y Abertis no se encontró relevo.
Además del Gremi d’Hotels, continúan en el pleno entidades financieras como CaixaBank y su holding de participadas Criteria, Banc Sabadell y Banco Medionalum. También empresas de gran tamaño de sectores diversos como Damm, Aguas de Barcelona e Indra Sistemas, junto a las grandes consultoras PwC y Deloitte y el RACC. Todos pagan un mínimo de 75.000 euros al año. La aportación de estos once escaños de plata representa este año unos ingresos de 825.000 euros para un presupuesto que supera los 24 millones.
La propuesta que ha trascendido después de los primeros con
Llotja de Mar
Para conservar los ingresos se plantea crear la figura de socios institucionales que no tendrían voto
tactos realizados es que se mantendrían como máximo uno o dos sillones de pago, frente al máximo de 14 que permite el reglamento de régimen interno de la institución. Fuentes de Eines de País re
Emili Rousaud, consejero ■ delegado de Factor Energia, estudia presentarse a las próximas elecciones, una posibilidad, que según explica, le han propuesto. Ya forma parte del pleno, en el que entró como representante de Pimec, patronal de la que es vicepresidente. Aunque quedan nueve meses para las elecciones, algunas instituciones han empezado a hacer algún movimiento ante el temor de que no haya candidatos, dado el actual desinterés que buena parte de la sociedad civil y del mundo empresarial está mostrando hacia la Cambra.