La escasez de mano de obra, una amenaza para el icónico pub irlandés
El pub irlandés, uno de los mayores atractivos turísticos de la isla y foco de actividad social, atraviesa momentos difíciles debido a la escasez de mano de obra en la hostelería, una tendencia también detectada a nivel global. Desde el pequeño pub rural, donde corren las pintas entre el folk de músicos locales y rápidos tentempiés, hasta los más sofisticados de las ciudades, con DJ y amplios servicios de restaurante, muchos se ven obligados ahora a alterar su oferta de ocio con cierres semanales selectivos y cambios de horarios.
“Hemos perdido más o menos un tercio de la mano de obra que teníamos antes de la pandemia de covid”, explica Donall O’Keeffe, consejero delegado de la Asociación de Taberneros Autorizados (LVA, en inglés), uno de los lobbies más antiguos de Irlanda. Representa desde 1817 a las public houses –de ahí el nombre de pub–. “La hostelería –señala– tuvo restricciones durante 22 meses, a veces estuvo totalmente cerrada y otras muy restringida. Así, mucha gente se fue a otros trabajos en la construcción, el comercio o la distribución, y ha abandonando definitivamente el sector”.
La fuga es de en torno al 33%, y la mitad de esa cifra corresponde a trabajadores extranjeros que volvieron a sus países.c