La Vanguardia (1ª edición)

El Girona de Marc Gasol también es de Primera

En seis meses, el pívot de Sant Boi y presidente sube a su club

- Carles Ruipérez

Menudo día para Girona. Antes del ascenso del fútbol, le tocó el turno al baloncesto.

Sonó la bocina. Se acabaron los 40 minutos de la final por subir a la ACB. Y se terminaban también los 14 años del Girona fuera de la máxima categoría. En ese momento, en el del ascenso, todos los jugadores buscaron a una persona en la pista. Todos los ojos de los espectador­es de Fontajau, atiborrado, se dirigieron hacia el mismo hombre. Todos querían abrazar y felicitar a Marc Gasol, jugador, estrella, mediano de los Gasol, de 37 años, estaba tocado en la rodilla tras una acción fortuita en la semifinal contra el Lleida, pero no se lo podía perder. Había vuelto de Estados Unidos para esto. Y ahí estuvo en el salto inicial con Larsen. Jugó los primeros siete minutos. Y cuando en el último cuarto las cosas se pusieron difícil –Estudiante­s se llegó a poner a dos puntos– entró para que el ascenso no se escapara. Con dos canastas en la pintura (11 puntos en total) pero también con dos tapones, a Dee y Faggiano, y con dos rebotes en defensa (a un tiro libre de Nacho Martín y a un triple de Adams) para dejar sin opción al histórico club madrileño.

“Para mantenerme a mí hoy fuera de la pista tendría que no haber podido caminar”, confesó el propio Gasol, que debutó el 3 de diciembre contra el Huesca con 19 puntos y 17 rebotes.

Ayer no hizo falta una exhibición, sino madurez y tranquilid­ad. “Sin él no estaríamos aquí. Sin él, Girona no estaría en la ACB”, decía Albert Sàbat, el capitán. “La confianza que él da, en la pista y en el banquillo, es indispensa­ble para un equipo”, destacaba Jaume Sorolla.

Con Gasol también llegaron

En el último cuarto, el 33 entró para anotar cuatro puntos, poner dos tapones y capturar dos rebotes clave

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