Vox celebra sus resultados pese a ser irrelevantes para formar gobierno
Olona tiende la mano al PP para afianzar aquellas políticas que “alejen al socialismo”
En Vox tomaron ayer buena nota de los mensajes no verbales que sus dirigentes habían transmitido la víspera al no acertar a disimular su desazón por el recuento final de los votos, y su candidata al 19-J salió dispuesta a enmendarlo. Macarena Olona entonó un discurso triunfalista en el que se felicitó por el “gran resultado” obtenido por su formación al punto de haberse erigido en una “alternativa real” tras pasar a ser la tercera fuerza en el Parlamento andaluz.
La vecina más ilustre de Salocuando
Jbreña no solo no hizo autocrítica alguna a su campaña, en la que denunció haber sido víctima de “terrorismo informativo” por parte de los “medios partidistas impulsados por las subvenciones públicas”. Sino que, incluso, quitó hierro a los 14 escaños finalmente obtenidos
en Vox aspiraban a no bajar de 20. “Lo importante no son los números, sino lo que se hace con ellos, lo mismo ocurre con las mayorías absolutas”, advirtió.
Escuchando el discurso de la candidata ultranacionalista podría entenderse que Vox tuviera la llave del Palacio de San Telmo cuando la mayoría absoluta obtenida por el PP libra a Juanma Moreno de tener que tejer coalición alguna para formar gobierno. Aunque, ya en el turno de preguntas, Olona matizó que su mano tendida a los populares se limitará a “afianzar” todas aquellas políticas que “alejen definitivamente al socialismo” mediante una “oposición útil que sirva para mejorar la vida de los andaluces”. “Ayudaremos a que el futuro Ejecutivo ofrezca su mejor versión posible”, se prometió.
Pese a que insistió en descartar su inminente viaje de vuelta al Congreso de los Diputados, cuyo escaño aún conserva, la nueva etapa política de Olona en Andalucía podría ser más corta de lo esperado.
La dirigente valenciana dejó la puerta abierta a ser la candidata al Congreso en las próximas generales del 2023 si así se lo pide el presidente de su formación, Santiago Abascal: “Soy soldado de Vox, pero ante todo soy hija de Dios y no puedo asegurarle cuáles son los designios que están por venir”, señaló ante los 13 diputados regionales que la observaban a pocos metros.
A la espera de conocer lo que pueda decidir Abascal, Olona descarta protagonizar un nuevo cambio de padrón y mantendrá su “residencia familiar” en la localidad granadina de Salobreña –donde se empadronó para cumplir con la legislación electoral para concurrir en los comicios autonómicos– desde donde se desplazará hasta Sevilla siempre que así lo requiera el desempeño de la dirección del grupo parlamentario de la ultraderecha en la Cámara andaluza.c
Su etapa en Andalucía podría no ser muy larga y deja la puerta abierta a ser candidata nacional en el 2023