Aragonès se reunirá con el vicepresidente de la Comisión Europea
planteará que concurran por separado Catalunya y Aragón para ese año. Sin embargo, sí que se abriría esa posibilidad para el 2034, descartando, por ahora, una candidatura conjunta como se ha estudiado hasta el día de hoy.
Alejandro Blanco se reunió ayer con Pere Aragonès en Barcelona,
a quien le comunicó sus intenciones. Igualmente, el COE asegura que no ha enviado por escrito al Gobierno de Aragón una comunicación oficial, tal y como asegura el Ejecutivo de Lambán, en la que diera por muerta la candidatura conjunta y que tan solo hubo una llamada de teléfono al consejero de Educación, Cultura y Deporte aragonés, Felipe Faci, comunicándole “el estado de la situación”.
Hasta ahora, la candidatura, que debía incorporar a ambas comunidades autónomas, no ha podido prosperar tras las continuas negativas del presidente aragonés, el socialista Javier Lambán, a aceptar el acuerdo para el reparto de pruebas alcanzado a finales de marzo en la comisión técnica en la que estaban representados los ejecutivos central, catalán y aragonés y el propio COE.
El mandatario aragonés ha exigido siempre una candidatura “en pie de igualdad” entre Catalunya y Aragón, como entiende que le prometió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en septiembre, y considera que el reparto de pruebas, que dejaba todo el esquí alpino en las estaciones gerundenses de La Molina y La Masella, no sigue esa premisa. Por ello, en las últimas semanas ha hecho contrapropuestas, como un reparto por género de las pruebas, que ni la Generalitat ni el COE han aceptado.
Catalunya, por su parte, iba a presentar al COE una candidatura en solitario tras constatar que la posición del mandatario aragonés no tenía marcha atrás y dejaba la candidatura conjunta en un punto de “no retorno”. Así lo anunció públicamente la semana pasada la consellera catalana de Presidència, Laura Vilagrà. El COE admitió recientemente la posibilidad de apoyar una candidatura solo catalana, pero la ha descartado en los últimos días.
Pese a conservar un resquicio de esperanza, Blanco es pesimista. El presidente del COE tiene en su poder vídeos de las seis reuniones técnicas en las que se pronuncian los responsables de Aragón favorablemente a la primera de las propuestas acordadas y que Lambán enmendó. Así, en una de estas grabaciones, en el cuarto de los encuentros manifiestan que “el planteamiento realizado en la última de las reuniones nos parece acertado”, y que es una “opción más que aceptable”.c
El proceso de normalización en las antes estrechas relaciones institucionales entre la Generalitat de Catalunya y la Comisión Europea ha comenzado. El vicepresidente del Ejecutivo comunitario Margaritis Schinas se reunirá el jueves 30 de junio en Barcelona con el president Pere Aragonès, avanzaron fuentes comunitarias a este diario.
La reunión coincide con el paso de Schinas por la capital catalana para participar en actos relacionados con el sector de la salud y la industria farmacéutica. Fue la oficina de Schinas quien solicitó el encuentro a la Generalitat, que ayer lo confirmó al Ejecutivo comunitario. Schinas será el primer miembro de la Comisión de Ursula von der Leyen en realizar una visita institucional a la Generalitat desde su toma de posesión en diciembre del 2019.
Aunque no es el primer encuentro entre ambas partes, pues en enero la consellera de Acció Exterior, Victòria Alsina, se reunió con la comisaria de Cohesión, Elisa Ferreira, con otras representantes de la Eurorregión, a ninguna de las partes se les escapa la relevancia del momento. Entonces Alsina reclamó a Bruselas “normalidad” en las relaciones con Catalunya y esa es la palabra clave que utilizan en Bruselas para explicar la reunión.
“La visita forma parte de la normalidad institucional”, explican fuentes del entorno de Schinas, un político griego con estrechos lazos con el PP español. La última reunión entre miembros del Govern y la Comisión databa del 2015, cuando Artur Mas se encontró con la comisaria responsable de Transportes. En aquel momento las relaciones ya eran tensas, pero a partir de entonces, coincidiendo con el auge del procés, la fluidez que había caracterizado las relaciones entre Barcelona y Bruselas, por encima del peso que en general corresponde a una región europea, pasaron de la tirantez a la indiferencia y el silencio absoluto.c
El Comité Olímpico Internacional tiene previsto emitir un comunicado abogando por el diálogo
La opción de plantear propuestas por separado solo se estudia para el 2034 y si cae ahora la conjunta