Sant Miquel del Fai seguirá cerrado todo el verano
La Diputación de Barcelona aborda la recta final de la restauración del recinto, clausurado hace cinco años
El espacio natural de Sant Miquel del Fai podría reabrirse al público el próximo otoño. No podrá hacerlo este verano, como hubiera sido el deseo de su propietario, la Diputación de Barcelona, porque las obras de restauración de los lugares más deteriorados y el alto peligro de incendio así lo desaconsejan. Así se lo comunicaron ayer a los alcaldes de la zona, durante una visita al lugar, los responsables de la corporación provincial, que desde mayo del 2017 hasta la actualidad ya ha invertido casi 5 millones de euros en la puesta a punta de Sant Miquel del Fai para su reapertura en las máximas condiciones de seguridad.
Esta finca de 70,5 hectáreas de superficie y gran valor patrimonial, integrada en el espacio natural de los Cingles de Bertí, incluye, además de sus atractivos paisajísticos y medioambientales, un importante patrimonio arquitectónico declarado Bien Cultural de Interés nacional (BCIN). En el 2017, la Diputación de Barcelona formalizó la compra de la finca para preservar sus valores patrimoniales y convertirla en un espacio de uso público.
Entre las actuaciones que se llevan a cabo destacan la consolidación de taludes y riscales. En la actualidad se están acabando las obras del aparcamiento y el acondicionamiento de los caminos interiores del itinerario visitable, así como las obra de la casa Prioral.
La recuperación de Sant Miquel del Fai ha resultado una empresa plagada de dificultades que la Diputación de Barcelona
ha ido superando y que permite confiar por fin en una pronta reapertura. En este tiempo este espacio singular ha padecido los embates de dos fuertes temporales, en marzo del 2018 y en enero del 2020, y también ha sufrido la inactividad empresarial provocada por la pandemia, que ha retrasado los planes iniciales de reabrir el recinto durante esta primavera.
En un futuro próximo, Sant Miquel del Fai será un espacio más integrado en la Xarxa de Parcs Naturals de la institución que preside la alcaldesa de l’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín. En esta recta final de los trabajos de acondicionamiento se está trabajando en la contratación de un sistema de control de accesos y de un equipo de informadores.
Los planes de futuro de Sant Miquel del Fai presentados ayer a las autoridades de la zona pasan por promover la gestión activa para la conservación y mejora del patrimonio natural y cultural; fomentar la calidad educativa y divulgativa; abrir la finca a todo tipo de público y facilitar la accesibilidad universal; priorizar el recinto como espacio distribuidor de visitantes hacia los territorios más próximo, y darlo a conocer como uno de los lugares más emblemáticos
Los efectos de dos temporales y de la pandemia retrasaron el calendario de reapertura
de Catalunya.
La visita a Sant Miquel del Fai incorporará un itinerario con 12 puntos de interés, entre los que no faltarán los riscales, las grandes paredes formadas por rocas sedimentarias, y las cavidades naturales abiertas por el efecto erosivo del agua; la iglesia románica de Sant Miquel, una singular construcción troglodítica del siglo X; los saltos de agua del Rossinyol y el Tenes; el lago de las Monges; las cuevas de Sant Miquel y de las Tosques; la casa Prioral, edificio de los siglos XVI y XVII, o la pequeña ermita de Sant Martí, otro templo románico de los siglos XII y XIII.c