“El Brexit es un proyecto contra la civilización”
Músico, actúa hoy en el Palau de la Música
El músico y compositor alemán Max Richter vuelve hoy a Barcelona tras su paso hace un par de años por el festival Cruïlla XXS y hace unos cuantos más por el Sónar. Richter (1966) en esta ocasión se estrena en el Palau de la Música (20 h), acompañado por un quinteto de cuerda y una narradora, con dos piezas propias como Infra y The Blue Notebooks, inspiradas en los atentados terroristas de Londres del 2005 y en la guerra de Irak, respectivamente.
¿Cómo nacieron estas dos obras?
The Blue Notebooks es básicamente un álbum de protesta en un sentido tradicional en la línea de Woody Guthrie y Bob Dylan, supongo que también de la del punk. Es música sobre el mundo en el que vivimos y cuando lo escribí fue justo antes de la guerra de Irak. Y en aquella época se estaba implantando un relato sobre la de que hubiera ese conflicto, que para mí tenía que ver más con la ficción que con la realidad. Infra lo escribí en el 2008 para un ballet y es sobre el atentado de Londres. Son dos piezas que hablan de lo que pasaba en el mundo en ese momento, y creo que la música sigue siendo un buen medio para hacerlo.
¿Son composiciones que siguen siendo actuales?
El escenario de Notebooks, su carácter antiguerra, antiviolencia y de estar al lado de las víctimas es desgraciada e increíblemente relevantes en este momento, tanto a nivel global como en escenarios más concretos, como por ejemplo Ucrania. Son siempre los mismos viejos problemas con diferentes vestidos.
Cuando compone ¿siempre busca comunicar con el oyente por encima de todo?
Componer es para mí hablar de cosas que considero que son importantes para mí y confío que otra gente las encuentre interesantes. Mi sensación es que aún no hay suficiente música en el mundo, necesitamos más. Quiero plantear preguntas sobre las grandes cuestiones, cómo hay que organizar el mundo, la calidad climática, la justicia. Mi objetivo es crear un espacio para estas cuestiones desde la música.
¿Tiene algo en mente sobre Ucrania, el Brexit?
Es difícil hablar del Brexit, era fundamentalmente un drama interno del Partido Conservador que se ha convertido en un proyecto contra la civilización, y desgraciadamente un absoluto desastre para el Reino Unido y Europa. Espero que lo que está ocurriendo ahora sea el inicio de un proceso de volver atrás y aunque tarde una década esperamos todos que algún tipo de racionalidad vuelva a prevalecer.
¿Está seguro de esto último?
Bueno… los políticos británicos son increíblemente estúpidos. Pero, en síntesis, es una tragedia absoluta. Y lo de Ucrania también es una tragedia. Mi tema más reciente, Voices, que se basa en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y que hace unos días tocamos en Londres, nació a raíz de la brutalidad de la política en la era Trump. Es una pieza con la que pretendes evitar que la civilización vaya hacia atrás. Esa Declaración es una medicina que en la actualidad curaría muchos males, pero hemos de tomarla y para eso antes hemos de hablar de ella, que es lo que pretendo con estas Voices.
Usted compone bandas sonoras, piezas para ballet... ¿Cómo lleva tantos proyectos a la vez en su cabeza?
Bueno… creo que todos los músicos están locos. Yo vivo la vida cada segundo del día, toda la vida. Por eso cada uno de esos proyectos tiene su espacio pero por encima de todo, todos ellos están conectados. Es como pasar de una habitación a otra en tu casa, es algo en realidad muy natural.
Cuando toca en el escenario, ¿siente mayor responsabilidad si son piezas de otros compositores que las suyas?
Tocar la música de otra gente es algo radicalmente diferente. Tocar a otros te motiva un tremendo respeto y por lo tanto es como un enorme desafío hacerlo en vez de tu propia música. Son dos cosas psicológicamente muy, muy distintas.c