La Vanguardia (1ª edición)

La artística acude al rescate

El bronce del equipo español en la prueba de Highlight maquilla el fiasco de la natación en línea; las ‘sirenas’ llevan 41 metales en 19 años

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La vena estética de la natación española nunca falla. Se llame sincroniza­da o artística, las coreografí­as made in Spain, por su plasticida­d y su ejecución técnica, siempre cumplen en los Mundiales. Aunque sea por la mínima, como ha sucedido en Budapest 2022. El bronce que se colgaron ayer en la Isla Margarita las diez componente­s del equipo español en la prueba de Highlight salvó, una vez más, la pobre actuación de la delegación enviada por la Federación Española de Natación (RFEN).

El recuento descubre un rendimient­o asombroso de la natación artística española, aunque se haya renovado continuame­nte y haya dejado de aferrarse a los éxitos de las míticas Tarrés, Mengual, Fuentes o Carbonell, sus grandes referentes. En los últimos 19 años, desde Barcelona 2003, es decir, en las últimas diez ediciones del Mundial, la natación artística española ha logrado nada menos que 41 medallas, más de 4 de media por campeonato. Y en la mitad de estos Mundiales –en cinco ediciones–, ha salvado los muebles a la natación en línea que se fue de vacío.

Sucedió hace dos años en Gwangju, cuando los tres metales que se colgaron Ona Carbonell –dos platas en sus dos solos– y el equipo en la rutina especial del Highlight taparon el cero de la natación. Y ha vuelto a pasar ahora en Budapest con el bronce del equipo en la misma prueba... y con el mismo tema musical, el contundent­e Thunderstr­uck de la banda de rock duro AC/DC.

En esta ocasión, la coreografí­a española obtuvo una valoración de los jueces de 91,9333 puntos, cerca de Italia, plata con 92,2667. El oro fue para Ucrania, con 95,0333. El mismo podio que en el 2019, favorecido también ahora por las ausencias de tres grandes potencias como Rusia, Japón y China. El equipo español ya apuntaba a medalla en la actuación preliminar, en la que era tercera. Paula Ramírez, una de las veteranas, aspiraba incluso a cazar la plata de Italia, que tenía a solo dos décimas. “Es de las veces que más ‘agresivas’ estamos, con más seguridad y ambición. Nos sentimos con más fuerzas para atacar a Italia”, comentaba en la previa la nadadora catalana de 26 años. “Nos hemos notado fuertes y con mucha energía, pero tenemos cosas que mejorar. Es muy positivo que estemos solo a tres décimas de la plata sin haber realizado nuestro mejor ejercicio. Tenemos muy claro lo que podemos mejorar”, explicaba Ramírez a la Federación Española.

Al final se quedaron a solo tres décimas de la plata.

De aquel equipo español de hace dos años al de ahora repiten cinco de las diez componente­s: Abril Conesa, Berta Ferreras, Blanca Toledano, Paula Ramírez y la capitana, Txell Mas. Se les han sumado Emma Garcia –pareja de Pau Ribes en el dúo mixto–, Cristina Arambula, Mireia Hernández, Iris Tió y Alisa Ozhogina. Este mismo conjunto dirigido por Mayuko Fujiki logró la cuarta posición en la final de equipos rutina libre, a solo 1,1 puntos del bronce de Japón. Hay futuro.c

Era el partido que necesitaba, una remontada épica a una potencia como Italia, para fortalecer el ánimo del equipo y lanzar la candidatur­a a las medallas. La selección española masculina ya está en cuartos de final del Mundial, sin tener que pasar por los octavos como primero del grupo C, después de vencer a los transalpin­os en un último cuarto soberbio, 0-4, en el que emergió la figura del portero Unai Aguirre –designado mejor jugador– y el olfato de Álvaro Granados.

Los de David Martín estuvieron brillantes después de haber tocado fondo en el segundo cuarto, en el que encajaron un severo correctivo de 5-1 que ponía un peligroso 10-6.

Hasta ese momento, España había realizado una buena salida, con un 2-5, que Italia corrigió antes de cerrar el cuarto con un 2-0 que llevó a Martín a cambiar de portero en la segunda manga: sustituyó a Unai Aguirre por Edu Lorrio, pero no le surtió el efecto deseado. Al contrario: el meta del Sabadell encajó 5 goles en 5 lanzamient­os y España se hundió. De ganar de 3 a perder de 4.

Con el 9-6, Martín rectificó y recuperó al portero del Barcelonet­a. Y España despegó. Con Aguirre cerró el cuarto con un parcial de 1-2 con doblete de Sanahuja, en el tercero mantuvo la igualdad (2-2), y en el cuarto, la selección se salió con un recital defensivo, del portero y de Granados, con 3 goles.

En cuartos, el miércoles, se mide, en teoría, a Montenegro.

España: Aguirre, Munárriz (2), Granados (3), Sanahuja (2), De Toro (1), Larumbe (2), Famera (1), Cabanas, Tahull (2), Perrone, Mallarach (1), Bustos, Edu Lorrio (ps).c

Como en el 2019, el equipo de artística salva los muebles a la natación a ritmo de heavy de AC/DC

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