La Vanguardia (1ª edición)

Argimon pide que los mayores recuperen la mascarilla en los espacios interiores

Aunque la mayoría de los contagios son leves, preocupa la presión sobre los hospitales Salvemos la sanidad pública

- Redacción Blanc y/l Roser Fernández

El conseller de Salut, Josep Maria Argimon, se declaró ayer “preocupado” por el aumento de la covid en las últimas semanas y cómo esto puede afectar a la atención médica –sobre todo la hospitalar­ia– durante el verano, a causa de las vacaciones de los sanitarios. Esta doble situación hizo que el conseller de Salut pidiera que las personas mayores y las vulnerable­s recuperen el uso de la mascarilla en lugares cerrados o mal ventilados.

En este sentido, expresó su inquietud por el aumento de pacientes ingresados en ucis por covid, que han pasado de 26 a 46 en tres semanas, así como por la subida de la cifra de hospitaliz­aciones de pacientes con covid. Aunque muchos de estos pacientes en planta no están ingresados a causa de la covid sino de otras patologías, el hecho de que tengan el coronaviru­s obliga a aislarlos de otros enfermos y dificulta la gestión de los centros.

Argimon informó de que las variantes BA.4 y BA.5 de ómicron representa­n ya el 60% de los contagios en Catalunya y que segurament­e llegarán a casi el 100% en pocas semanas. Aunque ambas son más transmisib­les que las variantes anteriores, en principio no parecen más graves. El conseller también explicó que el 50% de los contagios

Hde virus respirator­ios que se producen actualment­e en Catalunya correspond­en a la covid, y por tanto es muy probable que las personas que tienen síntomas leves como dolor de cabeza y cansancio estén infectados.

Por este motivo, Argimon pidió que las personas con síntomas leves no vayan a los ambulatori­os, sino que tomen fármacos antitérmic­os y se queden en casa. “Muchas personas están dando positivo estos días”, confirmó ayer Roger Paredes, jefe del servicio de enfermedad­es infecciosa­s en el hospital de Can Ruti en Badalona. “La mayoría de los cuadros son leves. Pero tenemos muchos contagios entre médicos y enfermeras, y los próximos días serán complicado­s a nivel de presión hospitalar­ia”.

Según Paredes, entre los síntomas más habituales causados por las variantes actuales del coronaviru­s destacan la congestión nasal, el dolor al tragar y, en ocasiones, dolor de oído. Por el contrario, “en este momento estamos viendo muy pocos casos de anosmia”.

Estas observacio­nes coinciden con la publicació­n de un estudio en la revista JAMA que confirma que ómicron comporta un riesgo más bajo de pérdida de olfato que las variante anteriores del coronaviru­s.

El estudio, que ha analizado 6.053 casos de covid leve registrado­s en mayores de 18 años de Río de Janeiro entre marzo del

El riesgo de pérdida de olfato por la covid es más bajo con la variante ómicron que con las anteriores

ay dos grandes amenazas para la sanidad pública. Primero, su financiaci­ón: si los fondos covid que el Estado transfirió a las autonomías no se consolidan en sus presupuest­os, habrá nuevos recortes. Segundo, la falta de profesiona­les que ya afecta a la capacidad de respuesta del sistema por una inadecuada planificac­ión de plazas, criterios de acceso y condicione­s laborales no competitiv­as.

Miremos qué pasa, escuchemos a la gente. La falta de recursos, económicos y profesiona­les, afecta al acceso a la sanidad pública con listas de espera inaceptabl­es y con problemas de salud no diagnostic­ados a tiempo, empieza a afectar a la calidad de la atención y a la capacidad de respuesta del sistema a la cronicidad, a los problemas de salud mental. Y se generan más desigualda­des que nunca porque los que pueden y quieren tienen la alternativ­a de ir a la sanidad privada, la que se paga.

Y el Gobierno, en lugar de centrarse en eso y en recuperar la confianza en la sanidad pública, dice que salvará a la humanidad de la privatizac­ión de la sanidad con el proyecto de ley por la que se modifican varias 2020 y marzo del 2022, ha constado que un 6% de las personas contagiada­s con ómicron sufren pérdida parcial o total de olfato. Este porcentaje es inferior al 53% registrado con la variante original de Wuhan o al 42% de la variante delta que fue dominante en la segunda mitad del 2021.

Los datos de Brasil indican que el tiempo medio que tarda

Directora general de La Unió, Associació d’Entitats Sanitàries i Socials normas para consolidar la equidad, universali­dad y cohesión del Sistema Nacional de Salud (SNS), que pretende excluir de la sanidad pública a los centros que no son de gestión directa o que no son entidades del sector público.

Desde la falsa e intenciona­da premisa de que concertar es privatizar hay una clara voluntad de recentrali­zación y una invasión competenci­al. Intenciona­lidad, y también desequidad, porque el proyecto de ley, en cambio, no revierte el privilegio en aparecer la anosmia con la variante ómicron se ha reducido a 3,6 días desde el inicio de los síntomas. Con la variante original del coronaviru­s era de 7,5 días, más del doble.

Estos datos se refieren a la primera variante de ómicron, la BA.1 que fue mayoritari­a en invierno. Aunque el porcentaje de personas con anosmia fue bajo, el número total pudo situarse en torno al medio millón en España solo en el pasado invierno, cuando se registraro­n casi seis millones de contagios en tres meses. Ningún estudio ha analizado todavía el riesgo de desarrolla­r anosmia con las variantes BA.4 y BA.5 que circulan ahora en España.c de los funcionari­os del Estado bajo el régimen de Muface, Mugju e Isfas de acceder desde la cobertura pública a las asegurador­as privadas. Concertar no es privatizar. Privatizar es pagar para ser atendido. Concertar es sumar a los servicios públicos centros que, cumpliendo con los requerimie­ntos, aportan infraestru­cturas, equipos y conocimien­to.

Catalunya es donde más afectación tiene este proyecto de ley porque desde sus inicios, hace más de un siglo, cuenta con una red de provisión de servicios públicos de salud estable, donde la concertaci­ón representa más del 65%, con entidades del sector público, mundo local, fundacione­s, órdenes religiosas, entidades de autogestió­n profesiona­l, mutualidad­es, entre otros que ofrecen una red de proximidad que genera equilibrio territoria­l (Fundació Althaia en Manresa, Xarxa Sanitària i Social Santa Tecla de Tarragona, Fundació Sanitària de Mollet...), una red de centros de excelencia accesible para todo el mundo (Orde de Sant Joan de Déu, Fundació Puigvert, Fundació Institut Guttmann...) y una red sociosanit­aria y de salud mental prácticame­nte concertada en su totalidad. ¿Queremos limitar el acceso a esta red a la ciudadanía que ahora accede gratuitame­nte con la tarjeta sanitaria? No perdamos nuestra identidad en aquello que ya tenemos, que funciona y que la ciudadanía aprecia. No tiene sentido destinar recursos que no tenemos a crear una oferta paralela de instalacio­nes y servicios públicos.

 ?? Blanca Blay / EfN ?? El conseller de Salut, Josep Maria Argimon
Blanca Blay / EfN El conseller de Salut, Josep Maria Argimon

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain