‘Guerreras’ contra lo imposible

(*) Galeries adherides al Gremi de Galeries d’Art de Catalunya.

“Realmente podemos batirlas. A por ellas vamos allí...”, se prometía Anni Espar, en nombre de las guerreras acuáticas, para conjurarse contra su bestia negra más recurrente: la intratable selección de Estados Unidos, vigente campeona mundial y olímpica. Aquella promesa de Espar fue después del hiriente 11-6 de la final del Mundial 2019 de Gwangju. Aquel “allí” para buscar la mejor revancha era Tokio, en los Juegos Olímpicos del año pasado. Pero tampoco: España sucumbió por otro doloroso 14-5. No ha habido manera... Quizás hoy, en el Mundial de Budapest, en unos cuartos con sabor a final.

En la piscina de la Isla Margarita, en medio del Danubio, las guerreras vuelven a tener hoy (16h) otra oportunidad de cobrarse una venganza que está ya congelada, de tanto tiempo que la tienen pendiente las jugadoras de Miki Oca: nueve años ya, desde aquella noche mágica de cuartos de final del Mundial de Barcelona 2013 en las Picornell, hace que España no vence a EE.UU. Aquel 9-6 fue el pasaporte hacia el oro, el único.

Desde entonces, nueve años de derrotas, casi a una por temporada, en Juegos, Mundial y Liga Mundial, con goleadas que escuecen (el 14-5 en la final de Tokio y el 18-9 en la Liga Mundial’21, las dos últimas), que convierten a las pupilas de Adam Krikorian en una pesadilla.

Sencillamente, esta selección de EE.UU. es imbatible. O prácticamente: ha enlazado los tres últimos oros olímpicos (201221), los tres últimos mundiales (2015-19) y las siete últimas Ligas Mundiales (2014-20)... Pero, curiosamente, delante ha tenido la España de Miki Oca en 4 de las 6 finales mundiales y olímpicas.

Así que si alguna selección puede derrotar a EE.UU. es la de España. “Complicado... pero la selección está bien”, comenta a La Vanguardia Nani Guiu, director técnico de waterpolo de la Federació Catalana y seleccionador catalán, que puso contra las cuerdas a EE.UU. (12-13) hace un año en Manresa. De acuerdo que era un amistoso, preparatorio para Tokio, pero el último cuarto, un 7-2 para las catalanas (con 9 de las 13 de Oca), fue la derrota parcial más sonrojante que han sufrido las de Krikorian.

“Si hubiese sido en partido oficial no hubiera pasado... pero les plantamos cara”, rechaza la comparación Guiu. “Aquello no fue señal de nada”, aunque en EE.UU. jugaban 8 de las actuales 13 y nunca bajan el pistón.

“Es un rival muy potente; así que habrá que aguantar con un tono alto y la máxima atención”, receta Oca

Para intentar vencer a esta EE.UU. que barrió a Holanda en la fase de grupos (11-7), España deberá jugar un partido perfecto. “No tienen ningún punto débil, tienen jugadoras físicamente muy potentes, que exigen mucho. Habrá que confiar, pero cuando has perdido tantas veces...”, analiza Guiu.

Para Oca, la receta pasa por “empezar bien y mantener un muy buen nivel de juego durante los 32 minutos; es un rival muy potente, que mantiene un ritmo muy alto y constante todo el partido. Así que habrá que aguantar con un tono alto y la cabeza en máxima concentración”.

Y cruzar los dedos para que la pantera negra bajo palos, Ashleigh Johnson, no tenga el día.c