La Vanguardia (1ª edición)

El PSC ve muy lejos un acuerdo con el Govern para los presupuest­os

Economia apuesta por la “prudencia fiscal” y marca distancias con Junts

- Luis B. García BÍS.elonÍ

Las negociacio­nes para explorar un posible acuerdo para los presupuest­os de la Generalita­t del año que viene están en marcha, pero el pesimismo rebosa entre los eventuales socios como consecuenc­ia del “ritmo muy lento” que el Govern está imprimiend­o a los contactos. Tanto, que en el PSC cunde la impresión de que el Govern les está haciendo perder el tiempo.

Ayer comenzaron las reuniones técnicas del Govern con los socialista­s y hoy continuará­n con los comunes y con Junts. El orden de estos encuentros da pie a pensar que el Ejecutivo ha cambiado su actitud respecto al partido de Salvador Illa, de hecho la consellera de Economia, Natàlia Mas aseguró ayer en Catalunya Ràdio que ya no hay líneas rojas para negociar con el

PSC, pero los de Illa salieron “decepciona­dos” de la reunión ante la falta de concreción que encontraro­n al otro lado. “’Necesitamo­s cifras más concretas!”, se quejaron.

Además, el tiempo apremia porque quedan apenas tres semanas para que pueda fraguarse un acuerdo que permita convalidar los presupuest­os en el Parlament a finales de enero. Más allá, el calendario preelector­al lo complicará todo.

“Faltan 15 días y aquí no ha empezado ninguna negociació­n”, lamentó ayer la portavoz Alícia Romero, tras acudir a la cita con los secretario­s generales de Presidènci­a y Economia. Romero echó en falta la presencia de algún “responsabl­e político” y además se llevó pocos detalles del proyecto de presupuest­os del Govern, por lo que advirtió de que negociar con esta situación es “difícil”.

Los socialista­s sospechan que, en el fondo, el Ejecutivo de Aragonès lo está demorando todo a propósito. “O quieren evitar la foto con Illa antes de las municipale­s o pretenden que les apoyemos los presupuest­os gratis”. Pero tanto comunes como el PSC vienen advirtiend­o por activa y por pasiva que eso no pasará. Solo negociarán antes de que el Govern tramita las cuentas en el Parlament. Después, el margen de maniobra para cambiar partidas se limita porque no se podrán mover entre departamen­tos.

La mala marcha de los contactos con los socialista­s contrasta con la afinidad que demuestran con el Ejecutivo de

Los de Illa se sienten “decepciona­dos” por la falta de concreción del Ejecutivo catalán tras el último encuentro

ERC asegura que todavía no hay un pacto para dar su voto a favor de las cuentas del Estado

Pere Aragonès en materia fiscal. En el PSC admiten que los planteamie­ntos del Govern “van en la línea” con la suya.

“Nuestro criterio es la prudencia fiscal”, remarcó ayer Mas, para quien la deflactaci­ón del IRPF que plantea JxCat es una medida “de titular”, “con un punto de populismo” y “regresiva”. El planteamie­nto de Economia coincide plenamente con el socialista: “Tenemos que ser prudentes. No es momento de bajar impuestos cuando hay que reforzar el Estado del bienestar, y hay que ir con cuidado con subirlos por el aumento de la inflación”, señaló Romero.

Entre tanto, la ponencia de Presupuest­os del Congreso cerró en la tarde de ayer jueves la

aprobación del dictamen que a partir del lunes irá al pleno, en el último trámite antes de la aprobación definitiva en la cámara baja. La mayoría de los grupos que apoyaron la investidur­a, entre ellos, el PNV, EH Bildu, Más País, Compromís, Teruel Existe o Coalición Canarias vieron aprobadas sus transaccio­nes con las que se aseguran inversione­s en sus territorio­s. En esta lista de los grupos que han cerrado acuerdos no figura ERC, que ayer aseguró que todavía no hay un pacto para dar su voto a favor de los presupuest­os. No obstante, en la votación en comisión se abstuvo en el informe final de la ponencia pero votó a favor en la mayor parte del resto de votaciones.c

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Barcae onRICn A DOD La consellera d’ Economia, Natàlia Mas

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