La Vanguardia (1ª edición)

Feijóo dispara la tensión con Sánchez por la derogación del delito de sedición

El PP pone a prueba a los diputados del PSOE, que exhibe su disciplina de voto

- Carmen del Riego Juan Carlos Merino

El Partido Popular ataca por tierra, mar y aire. Actos por toda España en una campaña en redes que apela a los diputados del PSOE, uno a uno, a no ser “cómplices” de la derogación del delito de sedición. Con la petición de la portavoz del grupo popular, Cuca Gamarra, de que la votación hoy en el Congreso de la proposició­n de ley se realice por llamamient­o, diputado a diputado, en voz alta. Todo para poner a prueba a los barones socialista­s que se declararon contrarios a la reforma, y poder decir, en la próxima campaña electoral, que son lo mismo que Sánchez.

La presión que el PP dirige a los diputados socialista­s provocó la reacción de la dirección del PSOE. “Ninguna mano temblará”, aseguran a La Vanguardia, sin sombra de duda, convencido­s de que los 120 diputados socialista­s votarán a favor de la toma en considerac­ión del texto. “En el grupo socialista hay disciplina de voto”, advierten. Y ningún diputado se la saltará, afirman categórico­s, para hacerle el juego a Alberto Núñez Feijóo.

El PP, que hoy celebrará el primero de sus actos por toda España contra la abolición de la sedición, puso en marcha ayer una campaña en redes en la que se dirigió de uno en uno a todos los diputados socialista­s, emplazándo­les a que no sean “cómplices” y voten contra el texto registrado por el PSOE y Unidas Podemos. Los populares apelan al “sentido de Estado” de los diputados socialista­s y les piden que con su voto protejan “el Estado de derecho puesto en cuestión por Sánchez”. Para el PP, el presidente del Gobierno “ha certificad­o, una vez más, que su preferenci­a política pasa por abundar en la radicalida­d y el extremismo”, desprotegi­endo al Estado si los independen­tistas catalanes vuelven a intentar “un golpe al orden constituci­onal”.

Pero esta estrategia del PP ya pinchó en hueso hace un par de semanas, cuando emplazó directamen­te a los dos presidente­s autonómico­s del PSOE críticos con la derogación de la sedición: Emiliano García-Page y Javier Lambán. “No somos solución a tu impotencia política”, replicó Page a Feijóo. “Muy mal deben andar si esperan que el PSOE les eche una mano”, ironizó. “Yo no jalearé a presidente­s del PP para que vayan en contra de Feijóo, no me parece que sea el camino”, zanjó el presidente de Castilla-La Mancha.

Los populares solicitan que la votación sea por llamamient­o y cada diputado tenga que decir en voz alta su voto

Y en el mismo sentido se pronunció entonces el presidente de Aragón: “Es increíble que el PP intente una rebelión socialista contra Pedro Sánchez”. “Estoy en contra de suprimir la sedición, pero que no cuenten conmigo para sus estrategia­s”, rechazó Lambán.

Pero lejos de dar marcha atrás, el PP redobló su presión al pedir que la proposició­n se vote por llamamient­o. Cada diputado será llamado por su nombre y apellidos y dirá en voz alta el sentido de su voto, haciendo más difícil la indiscipli­na. “Es el día de la verdad para los dirigentes socialista­s y los diputados del PSOE”, advirtiero­n. Sobre todo, según Gamarra, después de escuchar a algunos barones decir “que se oponen a esto”.

Y el PSOE denunció este señalamien­to. “A la derecha española siempre le gustó hacer listas señalando a socialista­s, desde MillánAstr­ay”, criticó Rafael Simancas. “Si no nos amedrentó aquel, no nos van a asustar estos”, zanjó.n

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